EscucharEl expresi Óscar Arias mantuvo este jueves una "discusión" con otro premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, debido a la situación que se está viviendo en Venezuela.
El "pleito" se armó durante un foro por la paz que se realizó en Argentina.
Pérez, un activista de derechos humanos argentino, considera que el gobierno de Caracas sufre un intento de golpe blando propiciado por Gringolandia, pero Arias no se come el cuento, pues según él, Venezuela dejó de ser una democracia hace mucho tiempo.
“Las democracias no tienen presos políticos”, opinó Arias para ver si Pérez, quien ganó el Nobel en 1980 se quedaba quedito.
Pero Pérez no se quedó callado y contraatacó: “La revolución bolivariana, comenzada por Hugo Chávez, sufre un intento de golpe de Estado tanto por la infiltración permanente de grupos paramilitares y parapoliciales desde Colombia como por una campaña de desprestigio mediática mundial”.
El argentino golpeó de nuevo al indicar: “Venezuela tiene un gobierno constitucional, pero Estados Unidos no quiere perder su poder sobre su patio trasero, por eso el hostigamiento".
El argentino pensó que el asunto iba a quedar ahí, pero Arias se mandó rudo al tirar varias chinitas.
“Los períodos de paz han sido instantes en la historia de la humanidad”.
"Hace rato que el gobierno de Venezuela daña a su pueblo con expropiaciones, libertades coartadas, inflación y crisis humanitaria. El chavismo le ha hecho mucho daño a su gente, pocos países están atravesando una situación tan mala a nivel mundial como Venezuela", explicó el expresidente.
Para rematar, Arias se mandó con una comparación que dejó a más de uno con la boca abierta.
"Hitler también llegó al poder por los votos", aseguró.
Los dos premios nobel de la paz participaron de una jornada de debate denominada “Voy por la paz”, la cual fue organizada por la Fundación para la Democracia.
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En la actividad también estuvieron otros ganadores del premio Nobel de la Paz como la abogada iraní y defensora de los derechos humanos Shirin Ebadi, galardonada en 2003; la activista indígena guatemalteca Rigoberta Menchú (1992) y el político y sindicalista polaco Lech Walesa (1983).
El capítulo venezolano tuvo espacio especial dentro de la charla, donde también se habló de la carrera armamentista y los negocios asociados a las guerras.
