Nacional

Así es como debe hacer la carta para que su hijo no reciba clases de sexualidad

Estas lecciones no son obligatorias, es decir, si algún padre o madre está en contra de que su hijo esté presente puede hacer una carta para que no reciba las guías

EscucharEscuchar

Los programas de afectividad y sexualidad integral, mejor conocidos como guías sexuales, que ha implementado el Ministerio de Educación Pública (MEP), tienen a los padres de familia agarrados de las mechas, pues unos están en contra, mientras que otros dicen estar de acuerdo.

Quienes están descontentos afirman que promueven el homosexualismo y el inicio temprano de relaciones sexuales, entre otras cosas, mientras que quienes sí las apoyan lo hacen bajo el fundamento de que pueden ayudar a prevenir embarazos tempranos y hasta el contagio de enfermedades.

Cabe recordar que esta iniciativa no es nueva, ya que empezó en el año 2012 (y se mantiene hasta el momento), los primeros en recibir estas informaciones fueron los estudiantes de sétimo, octavo y noveno año debido a que se determinó que eran los que más dudas tenían acerca del tema.

Los encargados de impartirlas son los profesores de ciencias, quienes en la primera parte hablan de aspectos propios de esa materia, mientras que en la segunda mitad conversan temas relacionados con sexualidad.

Para este 2018, el MEP decidió que los colegiales de décimo también las recibieran, eso sí, la única modificación es que para este caso serán los docentes de psicología quienes darán las lecciones. Las guías sexuales no se dan ni a escolares ni a los estudiantes de quinto año.

Incluso, la semana anterior, varios tatas cerraron 11 escuelas en San Carlos, sin saber, que esta materia solo se da en secundaria.

Estas lecciones no son de carácter obligatorio, es decir, si algún padre o madre está en contra de que su hijo esté presente puede hacer una carta para que no reciba las guías.

De acuerdo con el departamento de prensa del MEP, las guías sexuales van también dirigidas a los profesores para que aborden los temas de manera seria y responsable, pero sobre todo, que vaya de la mano con la educación que los padres dan en sus hogares.

El abogado de familia Pedro Beirute dijo que lo primero que se debe hacer antes de tomar una decisión es informarse acerca del tema, pues para él, se podría incurrir en un error basándose solo en rumores y no en realidades.

En caso de que definitivamente no quiera que sus hijos reciban este instructivo deberá hacer una carta dirigida al director o directora del centro educativo.

“Si un padre, madre o persona encargada decide que su hijo o hija no reciba el Programa de Educación para la afectividad y sexualidad integral, debe solicitarlo por escrito a la dirección del centro educativo, mediante una nota debidamente firmada, con la indicación de número de cédula o documento que lo identifique”, detalló el MEP por medio de un comunicado.

La carta deberá ser presentada por alguno de los encargados del menor de manera personal con la copia de la cédula de identidad, la fecha del día en el que va a ser entregada y debe decir lo siguiente:

“Yo ‘fulano de tal’ con el número de cédula tal, le solicito de manera respetuosa no incluir a mi hijo ‘zutano de tal’ en las lecciones del programa de afectividad y sexualidad integral”. (Ver machote).

Al final, el documento deberá aparecer firmado por el encargado del menor.

Si usted no está muy seguro de cómo es que se hace este documento, tranquilo, ya que el machote que hicimos está diseñado para que usted lo recorte, lo llene y lo entregue, ya que en ningún colegio le darán algún documento para que lo complete.

El asunto se puede complicar si entre los papás uno de los dos está a favor de que el hijo reciba las guías y el otro está en contra, más aún si están separados.

Beirute recomendó, en caso de que los papás vivan juntos, leer las guías y hablar del tema para llegar a un acuerdo.

El mismo consejo dio para los padres que están separados, aunque sabe que en este caso podrían haber más problemas.

“Si uno está de acuerdo y la otra en contra, deben tomar la decisión entre ambos, pero tiene más peso la opinión del padre que viva con el menor.

“Si las diferencias persisten, el caso lo deberá analizar un juez de familia, quien decidirá si el menor va o no a estas clases”, añadió Beirute.

Desde el MEP aseguraron que en todos los centros educativos están obligados a recibir este documento, si no es así, puede visitar la dirección regional de su zona para realizar la queja y hacer efectivo el trámite.

Bryan Castillo

Periodista

En beneficio de la transparencia y para evitar distorsiones del debate público por medios informáticos o aprovechando el anonimato, la sección de comentarios está reservada para nuestros suscriptores para comentar sobre el contenido de los artículos, no sobre los autores. El nombre completo y número de cédula del suscriptor aparecerá automáticamente con el comentario.