Los hombres que llegaron a los cuarenta y son divorciados empiezan a llenar los espacios de las estéticas, antes ocupadas de puras mujeres.

Así lo aseguró el presidente de la Asociación Costarricense de Longevidad y Medicina Estética, Miguel Ángel Chavarría, durante el III Encuentro Latinoamericano de Medicina Estética, que se celebra en San José.

El doc dijo que la diversificación de tratamientos para rejuvenecer la piel atrae cada vez más a hombres de esa edad, con proyectos de vida consolidados, divorciados y con un alto poder adquisitivo.

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También buscan tratamientos para reducir el abdomen y marcarlo, o sea, sacar cuadritos.

“Ha crecido el nicho de los hombres, especialmente aquel sector de divorciados, que se encuentran en una edad madura y desean verse bien para conseguir una nueva pareja”, explicó Chavarría.

Dijo que la tendencia se viene dando desde hace unos tres años y reveló que en las consultas, de cada 100 clientes, al menos 30 son hombres. Antes si acaso eran cinco.

“Bótox es lo que más buscan, los rejuvenece. Los hombres no se cuidan la piel, no usan bloqueadores y se les marca el entrecejo, las patas de gallo y quieren eliminar líneas de expresión. También quitan cicatrices, manchas, quieren bajar peso y moldear el cuerpo, sin cirugía”, explicó.

Contó que hace cinco años, los hombres que iban a hacerse procedimientos eran homosexuales, pero que eso también cambió, pues además de los divorciados, también van varones casados.

“Se da mucho que llega una mujer y sugieren que les gustaría que al esposo se le haga un procedimiento porque ella se está cuidando para verse bien y le gustaría que haga el marido haga mismo, pero que como es un tema tabú, no le gusta hacerse nada”, dijo Chavarría.

Entonces el doc le pide que traiga al esposo y cuando están ambos, sutilmente sugiere que se quite una línea de expresión o que mejore la calidad de piel y terminan realizándose algo.

“El mercado de hombres crece enormemente y no solo de los que tienen afinidad por el mismo sexo”, comentó.

Explicó que aunque cada vez más hombres se animan, suelen ser discretos y no les gusta que otras personas se enteren.

Cuadritos

Algo que se ha puesto muy de moda este año es el Emsculpt, un método para sustituir la grasa abdominal por cuadritos, sin cirugía y sin dolor.

Es un dispositivo creado para mujeres, pero con gran aceptación entre los varones, que trabaja con energía electromagnética y genera 20 mil contracciones musculares, lo que equivale a 20 mil abdominales, en media hora.

No produce el típico dolor que se genera al hacer ejercicio y en cuatro sesiones se acaba. Luego, las personas dan mantenimiento físico.

Diana Granados, quien participa en el Encuentro, dijo que este año ese procedimiento ingresó al país y que en Pérez Zeledón ha sido un boom. “Allí las consultas son más para hombres que para mujeres”, dijo.

Las cuatro sesiones cuestan alrededor de $1.500 (¢850.000 aproximadamente) y la empresa que las distribuye se llama BTL Estética Costa Rica.

Brayan Zúñiga, un hombre que se sometió a varios procedimientos de medicina estética (abdomen, espalda inferior, glúteos, nariz, mentón y mandíbula) dijo que lo hace por autoestima.

“Es para sentirme cómodo cuando voy a la playa, o con cierta ropa, para tomarme fotos. Otros lo hacen por trabajo para modelar y cosas así, pero yo me quiero sentir bien al verme al espejo”, dijo.