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Coronavirus: Exministra de Salud María Luisa Ávila da mensaje con estornudos

Con una anécdota que le pasó a una chiquita sacó algunas conclusiones

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María Luisa Ávila fue la ministra de Salud que implementó durante su administración, en el 2010, el protocolo del estornudo y del lavado de manos, por lo que aprovechó el tema del coronavirus para sacar una conclusión por una toma de televisión que vio.

Resulta que en el programa Divas, pero divinas de Multimedios, la infectóloga estaba viendo unas tomas de una escuela y una chiquita pequeñita estornudó y aplicó el protocolo, o sea, se cubrió con el antebrazo.

A doña María Luisa le llenó de satisfacción y orgullosa lo dijo en el programa, pero unos pocos segundos después, la misma chiquita comenzó como a limpiarse el uniforme, por lo que pasó las manos por la parte donde estornudó y luego por toda la ropa.

Es decir, lo que hizo con la mano, lo borró con el codo.

Por supuesto, era una niña muy pequeñita y en su inocencia cometió el error, pero de una forma involuntaria.

Situaciones de esas se ven en los centros educativos todos los días, por lo que la exministra aprovechó para dar su parecer.

“Estaba diciendo qué bien... los chiquitos aprenden y estornudan con el brazo, pero luego se limpiaba las babas. Era una niña muy pequeña. Por eso es que hay que decirle a los niños que si cuando estornudan y sale alguna secreción, no se deben limpiar con las manos", comentó Ávila.

María Luisa recomienda a los papás hacerles una explicación para que no cometan ese error, además de sugerirles que se limpien con alguna toallita.

Tantos los padres como los maestros les podrían limpiar la carita.

“Yo diría que la explicación se debe dar en la casa y en la escuela porque los profesores juegan un papel fundamental en esto. Los buenos hábitos se aprenden en la casa y se debe predicar con el ejemplo y que en la escuela lo refuercen con indicaciones”, agregó.

Añadió que con los niños se puede trabajar mucho y que cuando aprenden algo en edades tempranas lo repiten en la vida adulta.

“Por ejemplo, si la gente de Salud está diciendo que no se debe tocar la cara, pero ellos pasan tocándola, entonces no hay efecto. Hay que explicar bien a los niños”.

Añadió que con el tema del lavado de manos es fundamental estar repitiendo a los niños de su importancia y no bajar la guardia porque hasta a los adultos se les olvida.

“Se debe estar reforzando, es increíble, pero en los hospitales mucha gente del personal donde se supone que son los mejores informados, algunos no se lavan las manos. Hay que poner recordatorios”, añadió.

Imagínese que si eso pasa con los adultos, se puede esperar lo mismo de los chiquitos en las escuelas.

“No se puede cansar uno de decirle a la gente que se lave las manos, que no se toque la cara. Por supuesto, si yo estoy seguro que tengo las manos limpias y me pica una ceja, yo me rasco, pero si está en la calle y no tiene la certeza, debe evitarlo”, dijo.

Franklin Arroyo

Franklin Arroyo

Periodista egresado de la Universidad Federada. Integra el equipo de Nuestro Tema de La Teja. Trabajó en el Periódico Al Día, corresponsal del diaro Marca para Centroamérica y editor de la revista TYT del Grupo Eka.

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