El calor y los perros no se llevan.

Los dueños de esas mascotas, tan gustadas por miles de ticos, deben tener claro el daño que pueden causarles a esos animalitos sacarlos a caminar o a correr cuando el día está muy caliente. Se podrían quemar las patitas e incluso desarrollar enfermedades como el cáncer de piel.

El veterinario Mauricio Jiménez, director del Hospital de Especies Menores y Silvestres de la Universidad Nacional (UNA), explicó que las lesiones en las almohadillas de las patas de los perritos son más frecuente de lo que se cree.

“Hay personas que acostumbran salir a correr a horas no adecuadas, como el mediodía, y se llevan al perro para que también se ejercite, pero esto, además de exponer a las personas a fuertes radiaciones ultravioleta, también expone a los perritos”, dijo el especialista.

“El calor y la superficie por la que va a caminar el perro también hay que tomarla en cuenta, si es cemento o asfalto probablemente estará muy caliente y podría generar quemaduras en las patas de los perros; la gente usa zapatos, así que no se percata de las fuertes temperaturas a las que exponen a los animales”, agregó.

Mejor hora

El veterinario dice que lo mejor es llevar a las mascotas a caminar en la pura mañana o en la tarde cuando haya bajado el sol, pero si por la tarde todavía hay calor, es bueno ponerles un poquito de vaselina en las patas (si va a ponerle otro producto revise que no tenga alcohol porque eso aumenta el calor).

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Agua y sombra

Otra recomendación que da el veterinario es que cuando saque su mascota a pasear la lleve a sitios donde haya zacate ya que ese tipo de suelo no acumula tanto calor.

“Es importante que las personas elijan bien el lugar al que llevarán a su mascota; ojalá tenga árboles que hagan sombra porque así cuando ellos sientan la necesidad podrán sentarse a descansar. También deben ser cerrados para que no exista peligro de que salgan a la calle.

“Hay que ser muy conscientes a la hora de sacar los perros a hacer ejercicio. Probablemente vamos a querer que ellos se adapten a nuestra rutina y ellos son tan fieles que tratarán de hacerlo, caminarán todo el tiempo que les digamos aunque se estén quemando las patas por la necesidad de estar cerca de nosotros, por eso debemos tener mucho cuidado”, añadió.

Otro factor a tomar en cuenta es llevar una botella con agua y estarle ofreciendo al perrito para que tome y no se vaya a deshidratar, algo que podría causarle problemas en el sistema vascular y en el renal.

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El especialista dice que el calor extremo puede afectar sobre todo a los animales de razas braquicefáleas, los que por sus características físicas tienen problemas respiratorios.

Estos animalitos tiene el paladar suave, alargado y carnoso, las fosas nasales estrechas con cambios en la laringe y una tráquea pequeña. Hablamos, por ejemplo, del bulldog francés e inglés, los pugs, los boston terrier y los boxer.

Otras enfermedades

Jiménez dice que el sol no solo causa quemaduras a los perritos, el recibirlo en exceso está relacionado con padecimientos como cataratas, tumores y hasta cáncer de piel.

“El exceso de calor puede causar un shock térmico, inflamación cerebral e incluso la muerte, por eso es tan delicado. En la universidad hemos atendido perritos con tumores debido al cáncer de piel y esos procesos desgastan mucho a los animales porque hay que operarlos y en la mayoría de los casos (los tumores) se vuelven a hacer. La prevención es lo mejor”, explicó.

“Ahorita que tenemos climas ventosos también hay que tomar en cuenta a la hora de sacar los perros a pasear si hay polvo en la superficie porque si les entra a los ojos van a sentir irritación y se van a rascar mucho, eso podría causarles úlceras en los ojos”, añadió el especialista.

Si su perro llega a sufrir quemaduras en las patitas, lesiones en los ojos o en la piel o usted nota que tiene problemas de salud, lo mejor es que lo lleve lo antes posible a un veterinario. No lo atienda usted y mucho menos le aplique medicamentos sin consultar con un experto, podría agravar la situación.

Los mejores amigos del hombre merecen que los protejamos.

“Son tan fieles que tratarán de hacerlo, caminarán todo el tiempo que les digamos aunque se estén quemando las patas por la necesidad de estar cerca de nosotros”.

—  Mauricio Jiménez, veterinario