El epidemiólogo Rónal Evans dice que no es ninguna sorpresa que el país se quedara sin vacunas contra el covid-19 durante tres semanas, ya que ese era uno de los riesgos de depender de la empresa Pfizer para traer el medicamento al país.

Este jueves, a la 1 p. m., el Gobierno anunció en conferencia de prensa que la empresa estadounidense le informó, a las 11 de la mañana, que detendrá el envío de vacunas a nuestro país desde ahora y hasta el 15 de febrero.

El motivo es porque la empresa está haciendo unos ajustes en la producción para poder aumentar la cantidad de vacunas que está entregando en todo el mundo, dijo el ministro de Salud, Daniel Salas.

Este jueves Pfizer también dio a conocer que comenzó a adaptar sus entregas aumentado el número de dosis disponibles por ampolla.

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Hasta ahora, el laboratorio estuvo entregando cinco dosis de vacuna por ampolla. Sin embargo, los centros de vacunación lograban extraer seis dosis de esos frasquitos para vacunar a más personas.

“No es culpa del Gobierno lo que está pasando con Pfizer, la demanda que tiene esa empresa es mucha y ellos dan prioridad a los países que pagaron por adelantado, por eso es que yo vengo insistiendo en que no se puede depender de una sola empresa para traer vacunas al país.

“No entiendo por qué si tenemos un acuerdo con AstraZeneca y ya esa vacuna la están aplicando en Europa, aquí aún no la tenemos, también hay que preguntar cuándo llegarán las vacunas de la iniciativa COVAX. El Gobierno debe decirnos por qué no llegan las vacunas de AstraZeneca y COVAX, tal vez si da las razones del por qué ahorita solo podemos recibir las dosis de Pfizer, podemos entender y esperar que esto mejores pronto”, dijo el especialista.

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Precavidos

Román Macaya, presidente de la Caja, dijo que mientras se reanuda la llegada de las vacunas, el país seguirá con el proceso de la aplicación del medicamento que ya había recibido.

Además, se seguirán aplicando las segundas dosis que ya estaban reservadas, precisamente por si llegaba a pasar un inconveniente como este.

“Para todas las personas que ya recibieron la primera dosis, sepan que su segunda dosis está garantizada. Esto es algo que no se siguió en todo el mundo y no queríamos terminar en una situación en la que llegara el tiempo para la segunda dosis y no hubiera disponibilidad”, expresó Macaya.

Román agregó que incluso muchas personas criticaron a las autoridades cuando anunciaron que guardarían la mitad de las dosis recibidas, ya que decían que lo mejor era aplicar de una vez todas las que llegaban para abarcar más población, sin pensar en que por algún motivo los pedidos futuros podían atrasarse, lo que representaría un gran riesgo para la gente que estaba pendiente de la segunda dosis, la cual debe aplicarse 21 días después de la primera.

El ministro Salas dijo que Pfizer se comprometió a reponer las dosis que no mandarán en estas próximas semanas para que el país sí reciba las vacunas pactadas para el primer trimestre del año.