Nacional

Este Albino Vargas sí trabaja

“Yo soy Albino Vargas el bueno”

EscucharEscuchar

El Albino Vargas que le vamos a presentar sí bretea y es funcionario público. No se sumó a la huelga, cree en el diálogo para solucionar conflictos y disfruta ver películas y salir a comer algo con su familia.

Su primer apellido es Vargas y cuando debe aclarar que no es el sindicalista, muestra su lado más jocoso y dice: ‘Yo soy Albino Vargas el bueno’.

¿Cómo se toma este Albino Vargas como el líder sindical odiado por muchos y amado por otros?. Con humor. Le han pasado sus chascos, pero a sus 52 años ni siquiera le molesta cuando llamaban a su casa creyendo que era la ANEP (Asociación Nacional de Empleados Públicos) lugar en el cual, su tocayo el sindicalista, tiene 27 años de pertenecer.

“Uno a veces paga con tarjeta en algún comercio y la gente se le queda viendo. ¿Será o no será?, y es cuando hago la aclaración que yo soy el bueno y que no me gustan los pleitos. La gente tiene expectativas con este señor y algunos han dicho que tengo características similares, pero no me parezco", dijo.

Albino el bueno vive en Quebradas en Santo Domingo de Heredia y su papá, Albino Vargas León, es un agricultor de esos pochotones que aún bretea en un lotecito, ‘un roble’ dice su hijo y quien le inculcó ese amor por el brete.

“Aquí en Costa Rica es un nombre poco común, pero en otros países como Italia no pasa lo mismo. No sé porque me pusieron así, seguro por mi papá, nunca me lo ha dicho”, opinó el hombre.

Diálogo

Albino Vargas Chaves cree en en diálogo, no en la pelea. A diferencia del sindicalista, él hubiera encontrado el mecanismo para negociar con el Gobierno y cree que hubiera sido mucho más eficiente.

“Las cosas se resuelven hablando, negociando y el Gobierno ha estado abierto al diálogo. En esto de las huelgas siempre hay intereses, unos pocos influyen sobre muchos con la intención de obtener ganancias, creo que en este caso se aplica una frase que dice, en río revuelto ganancia de pescadores”.

Él mismo dice medio apoyar el movimiento, pero no se unió a la huelga porque su bretecito en la oficina le demanda tiempo.

De hecho, para poder realizar la foto, tomó un ratito de su hora de almuerzo para que lo buscáramos y la entrevista la dio cuando había salido de su oficina, en la sede central del banco Popular. Eso sí, en un principio dijo que a las 5 de la tarde y luego a las 7:30 de la noche porque tenía reuniones importantes, por supuesto que de brete.

Su departamento, precisamente, está buscando soluciones y alternativas para poder plantearlas a las más altas jerarquías, como debe ser.

Pese a que lo único que tienen igual es el nombre, este Albino cree que el otro cumple un rol importante dentro de la sociedad. “Cada quien se desempeña en lo que tiene que hacer, tiene un papel importante en el sindicato y es persona seria. Se equivoca como todo el mundo, pero me parece que su intención es buena, es ayudar al pueblo”, añadió.

Entre sus anécdotas cuenta una que incluye a su esposa Jeannette Mora. “Hace algún tiempo llamó a la casa una señora y dijo Anep y mi esposa entendió Jeannette y dijo que sí. Entonces manifestó que necesitaba hablar con Albino y le dijo que yo no estaba, que andaba trabajando”, explicó.

Sin embargo, la señora insistía que quería hablar con Albino y mi mujer dedujo que era el sindicalista y le explicó que yo no era él. “Pero la mujer le dijo pero estoy llamando a Anep y mi esposa seguía entendiendo Jeannette y le seguía diciendo que sí y la confusión seguía. Hasta que supuso que era Anep lo que decía. Luego me contó que por la similitud de los términos y porque a la señora no se le entendía muy bien fue que se generó todo el enredo”, contó.

Franklin Arroyo

Franklin Arroyo

Periodista egresado de la Universidad Federada. Integra el equipo de Nuestro Tema de La Teja. Trabajó en el Periódico Al Día, corresponsal del diaro Marca para Centroamérica y editor de la revista TYT del Grupo Eka.

En beneficio de la transparencia y para evitar distorsiones del debate público por medios informáticos o aprovechando el anonimato, la sección de comentarios está reservada para nuestros suscriptores para comentar sobre el contenido de los artículos, no sobre los autores. El nombre completo y número de cédula del suscriptor aparecerá automáticamente con el comentario.