Norma Orozco ha cambiado la vida de unas 500 personas, la mayoría de ellas niñas y adolescentes, al obsequiarles pelucas hechas con cabello humano.
La idea surgió hace cuatro años cuando su amiga Ana Vargas Ballestero se enfrentó al cáncer de piel y por eso Orozco tuvo que ayudarla a mantener su salón de belleza a flote.
“Tenía conocimiento de cómo trabajar con este tipo de pelucas porque lavaba las de las muchachas que trabajan en el hotel El Rey, pero decidí orar y pedirle a Dios una idea y él puso en mi corazón hacerlas tejidas, pues el cabello natural no se puede amarrar porque se suelta”, explicó doña Norma.
Poco a poco fue perfeccionando el proyecto y ahora ayuda a fundaciones pequeñas.
Esta vecina de Tirrases de Curridabat nos contó que en este tiempo gran parte de su trabajo le ha permitido contribuir con niñas y adolescentes de escasos recursos que, por enfrentar tratamientos de quimioterapia o sufrir de caídas de cabello extremas, son víctimas de bullying en sus centros educativos.
“Con las pelucas ellas recuperan su autoestima y alegría al poder compartir con otros niños los espacios de juego”, contó la solidaria estilista.
Para confeccionarlas, ella compra el cabello por kilo en salones de belleza nicaragüenses y su suegra se lo trae cada quincena o mes al país. Además, como las vecinas del barrio conocen su noble labor, llegan donde ella a regalarlo.
Incluso, una de las beneficiadas es Liset, una niña nicaragüense de 12 años, alumna de Natalie Borje, la exmaestra de una de sus hijas. A ella cada año le manda una peluca.
“La niña nació sin cabello y antes asistía a clases con una gorra para ocultar su problema”, contó.
También hace unas con gorritos para niñas menores de cinco años, para que les sea más sencillo manejarlas.
Desde su salón “Zaivel” en el centro de San José (150 al sur del parque Central), ella lleva esperanza a quienes atraviesan este complicado proceso.
Si usted desea contactarla puede escribirle al WhatsApp 8549-2911 o buscarla en el Facebook “Zaivel belleza”.
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O si lo prefiere, dese la vuelta este 31 de octubre a la escuela José Cubero en Guadalupe, donde se recibirá cabello natural y de paso se buscará crear consciencia en la población sobre la importancia de prevenir el cáncer.