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Muy íntimo: El mito del orgasmo simultáneo

Mauro Fernández. sexólogo

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Durante mucho tiempo la sexualidad fue blanco de las más severas represiones, las cuales desdichadamente se extendieron al campo de la ciencia, condicionando múltiples restricciones que impidieron el estudio sistemático de la respuesta sexual.

Esto generó un enorme desconocimiento sexual que tiñó de ignorancia, tanto a la sociedad como a las parejas.

Desde luego, este velo de censura provocó múltiples mitos, algunos de los cuales continúan circulando en nuestro medio, entre los que figura la falsa idea de que el hombre y la mujer normalmente experimentan el orgasmo de manera simultánea.

Esto ha creado múltiples temores e inseguridades en las parejas, que al ver que no consiguen “venirse juntos”, temen no ser compatibles sexualmente o piensan que tienen un problema sexual. Además, muchas hasta fingen el orgasmo con tal de cumplir esta falsa expectativa.

Hoy la ciencia es clara en señalar que rara vez el orgasmo ocurre de manera simultánea, por el contrario, en la mayoría de las parejas los orgasmos ocurren a destiempo, siendo usualmente el hombre el que lo experimenta primero.

Hoy se recomienda que la mujer experimente uno o más orgasmos antes de ser penetrada. Básicamente por dos razones, por un lado es muy común que el hombre termine primero y muy rápido, con lo cual suele privar del deleite a la mujer.

Por otra parte, contrario a lo que se dice popularmente, la vagina no es un órgano diseñado para desencadenar orgasmos, de tal forma que aunque el varón lograra múltiples embestidas pélvicas, rara vez estas hacen que la mujer llegue al éxtasis.

Más bien son las caricias genitales, sobre todo aquellas dirigidas al clítoris, las que provocan las máximas sacudidas de placer femenino y que, desde luego, se verán bien secundadas con una penetración.

Debemos dejar claro entonces que rara vez sucede el orgasmo simultáneo, y al día de hoy no se considera un objetivo de pareja. Lo que sí es un objetivo capital es que tanto él como ella consigan el orgasmo.

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