Usar las redes sociales para hacer publicaciones mientras se está breteando podría causarles serios problemas a las personas que tienen esa “costumbre”, ya que podrían ser despedidos.

Los famosos influencers son lo que deben tener muchísimo cuidado cuando hacen posteos en las redes sociales promocionando alguna marca, porque si lo hacen mientras están trabajando, el patrono podría molestarse.

Eric Briones, especialista en Derecho Laboral, dice que aunque la legislación laboral tiene ya 80 años de antigüedad y que cuando se redactó ni siquiera se pensaba en que las redes sociales iban a existir, hay una regla que trata sobre abandono de trabajo que podría aplicarse perfectamente en estos casos.

“Si a una persona la contratan en un horario de ocho de la mañana a cuatro de la tarde, ya sea como gerente, periodista, zapatero, o lo que sea, es importante que se cumpla el horario laboral pactado, por lo que dentro de ese tiempo no se debe hacer nada más allá de lo que estipule el contrato laboral para el cual debe estar disponible.

“Si la persona contratada pasa subiendo publicaciones a sus redes sociales como Facebook, Instagram, TikTok, Twitter o cualquier otra, el patrono podría suponer el mal uso de sus horas laborales. Ahora bien, si las publicaciones se limitan a su tiempo de descanso como el almuerzo, no le vería problema en que se hagan”, dijo Briones.

El especialista agregó que las redes sociales podrían hacerle una zancadilla a quienes las usen de forma desmedida, ya que si alguien quiere cambiar de trabajo es muy normal que la persona que está por contratarlo revise sus redes para ver si en el pasado pasaba publicando cosas durante el tiempo laboral, lo que sería un motivo para no contratarlo.

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Cuentas claras

Briones reconoció que en los últimos años el tema de los influencers ha crecido mucho en Tiquicia, ya que cada vez son más las personas reconocidas buscadas por las marcas para que los ayuden a promocionar sus productos a cambio de regalías o pagos.

El experto dice que en estos casos lo más sano es que las figuras públicas hagan sus publicaciones en redes sociales cuando no estén en horario laboral.

“Cuando se comparte el trabajo de publicidad en redes sociales con un contrato laboral formal pienso que lo mejor es sentarse con el jefe y ponerse de acuerdo sobre los términos para ver qué piensa él sobre el tema y así no tener problemas en el futuro. El patrono tiene todo el derecho de decir que no quiere que la persona haga publicaciones mientras está trabajando y eso hay que respetarlo, en ese caso el influencer deberá limitarse a promocionar productos cuando esté fuera de su horario laboral.

“Si el trabajador desobedece el patrono puede llamarle la atención ya sea de forma verbal o escrita y si el colaborador persiste en hacer publicaciones dentro del horario laboral el jefe podría llegar a despedirlo sin responsabilidad patronal”, manifestó.

Briones dijo que otra cosa que deben tener muy presente tanto los influencers como todos los que usan redes a la hora de hacer posteos es la lealtad.

“No sería lógico que si un juez se convierte en influencer vaya a subir publicaciones consumiendo drogas, aunque esté fuera del horario laboral porque eso afecta la imagen del Poder Judicial.

“Tampoco es lógico que si una persona trabaja en empresa que vende hamburguesas luego de terminar su jornada laboral se ponga a subir publicidad de las hamburguesas de la competencia. Es nuestro deber como trabajadores proteger la reputación de la empresa en la que trabajamos”, aseguró el especialista.

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Buscar el equilibrio

La presentadora de televisión Natalia Monge es influencer y ella sabe muy bien que todo en la vida debe tener un equilibrio.

“En un trabajo uno intenta acomodarse, lograr un balance entre la disponibilidad, el trabajo, los hijos y los clientes de publicidad. Lo primero que yo hago cuando me busca una marca es ver si el producto que quieren que promocione es afín a mis principios y valores y si está dentro de mis posibilidades sacar el tiempo para hacerlo, sino prefiero decir que no antes de afectar todo el equilibrio.

“El hacer publicidad requiere mucho tiempo porque uno mismo es camarógrafo, modelo, guionista, editor del video y todo lo que se necesite, por eso hay que programarse bien para salir con todo y que ese trabajo no afecte las demás actividades”, dijo Natalia.

Por su parte Esteban Mora, especialista en tedes sociales, dice que en estos casos lo que los influencers deben buscar es que los contratos laborales no generen incompatibilidad con la publicidad de las marcas para las que trabajan.

“La comunicación con las jefaturas es fundamental, así se evitan muchos problemas. Los influencers con frecuencia se ven en situaciones polémicas y los lugares donde trabajan se ven afectados, de alguna u otra manera, cuando esto pasa, por eso es importante tener mucho cuidado y mantener una buena comunicación con la empresa para la que se trabaja”, dijo Mora.