El préstamo de $1.778 millones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) es solo una curita en la gigante herida económica del país, pero era, definitivamente, el primer paso que había que dar para buscar la sanación.

El platal, que fue aprobado en la Asamblea Legislativa en segundo debate este lunes, le llegará al país en seis tractos semestrales.

Pero, ¿por qué era necesario pedir es “menudillo”?

Si no se daba el acuerdo, Costa Rica se convertiría en un país indeseable para los prestamistas, algo así como el amigo que le vive pidiendo prestado, pero cada vez le cuesta más pagar y por eso uno lo piensa para seguir echándole la mano.

El préstamo trajo bastante tranquilidad al ambiente, aunque para el economista Dennis Meléndez es una equivocación que el Gobierno solo busque equilibrar el presupuesto mediante impuestos, ya que, para él, el Ejecutivo debe esforzarse más por reducir el gasto.

“Si la Asamblea no aprueba los proyectos al Gobierno, este deberá buscar compensarlo mediante la reducción de gastos”, aclaró el economista.

Meléndez dice que lo peor que le puede pasar al país es que caigamos en una crisis más profunda y en la que no haya plata para pagar deuda ni los intereses.

“En esos casos las más perjudicadas son las familias más pobres, en este momento sostener la situación es un mecanismo para hacerlo de manera más pausada. Si permitimos que se nos derrumbe de la noche a la mañana, será para las familias más desfavorecidas”, añadió.

Sombrío panorama

El economista dice que si el acuerdo con el FMI se cae, estaremos en serios problemas.

“El próximo Gobierno va a tener que hacer algo de fondo porque ya no hay posibilidades de seguir encontrando parqueos para las crisis”, explicó Meléndez, durante el webinar “¿Cuál será el país a nivel económico que heredará el próximo gobierno?”, organizado por Coopenae.

Para Meléndez, el primer paso a seguir --después del acuerdo con el FMI-- es recuperar la confianza de la población porque sin ella no hay crecimiento económico, la gente no compra mucho y las empresas producen poco, lo que deja pocos ingresos a Hacienda.

“El problema principal que enfrenta el Gobierno es la deuda pública, que ha sido el principal mal de la economía junto con el déficit fiscal y no podemos obviar el alto nivel de desempleo y para ello se requiere reactivar la economía”, manifiesta.

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Meléndez dijo que, en los últimos 12 años, Costa Rica pasó de ser un país en el que la distribución del ingreso era relativamente razonable, a convertirse en el país con la peor distribución del ingreso y pasa por el endeudamiento familiar.