Como parte de las nuevas medidas de prevención por el coronavirus, el Ministerio de Salud pide a los feligreses que asisten a misa que no reciban la hostia en la boca, sino en la mano, y que al momento de darse la paz no se toquen.

“En aras de proteger a las congregaciones religiosas y grupos organizados de las distintas iglesias, el ministro de Salud, Daniel Salas, giró oficios para el arzobispo José Rafael Quirós, presidente de la Conferencia Episcopal, y Jorge Gómez, presidente de la Alianza Evangélica, solicitando que las celebraciones religiosas se lleven a cabo de forma que se evite el contacto mano - boca”, indicó Salud.

De esta forma, en el caso específico de las misas católicas, Salud pidió entregar la hostia en la mano, no en la boca y evitar el contacto físico en el saludo de la paz.

En el caso de las iglesias evangélicas, algunas tienen un ritual llamado santa cena, el cual debe acatar la misma recomendación.

De igual forma se pide contemplar estas instrucciones a la hora de hacer convivios u otras celebraciones religiosas.

Todo bien limpio

También se instruyó a las iglesias a verificar constantemente que los servicios sanitarios cuenten con agua y jabón para el lavado frecuente de manos y colocar en sitios visibles la rotulación con las medidas preventivas de lavado de manos y el protocolo del estornudo y la tos.

El ministro Salas dijo que se trata de una solicitud respetuosa y que están seguros de que las iglesias colaborarán.

“Se está recibiendo la nota del ministro, la cual se va tomar en cuenta en alguna determinación que será comunicada oportunamente a los feligreses”, dijo el arzobispo de San José, José Rafael Quirós.

Esta es la más reciente medida adoptada en el país contra el coronavirus, enfermedad que en cualquier momento llegará, según estiman los expertos, y que este martes contabilizó los primeros casos en Argentina y Chile y el primer muerto en España.

Este lunes, Salud hizo un llamado a cambiar la forma de saludar para evitar el contagio. Pidió hacerlo con los codos y no con las manos. Asimismo no dar beso en la mejilla, mejor solo un “hola” de larguito.

El ministro de Salud hizo énfasis en que ninguna medida preventiva será suficiente si la gente no se responsabiliza.

“Cortar la posibilidad de la infección está en la gente, en cuánto se están lavando las manos cuando llega de lugares publicos o antes de comer, en cuánto aplica el protoclo de la tos y el estornudo y cómo la gente con síntomas respiratorios no va a actividades masivas, escuelas o trabajos”, insistió.

El virus COVID - 19 (el más reciente coronavirus) se trasmite por medio de gotitas de saliva que salen por medio de la tos y el estornudo, o también por medio de una conversación cercana o por gotitas que hayan caído en un sitio en específico.

Salud ordenó al MOPT colocar rótulos en buses, terminales y trenes que digan “No se toque la cara si no se ha lavado las manos”.

"Las empresas autobuseras también deben estar desinfectando los asientos y otros lugares constantemente”, indicó Salas.

Salud giró otro oficio a la ministra de Trabajo, Geannina Dinarte, para reforzar el protocolo en los centros de trabajo, de manera que se designe a funcionarios a vigilar que se cumplan con los de tos, estornudo y aseo.

Sobre la suspensión de actividades masivas, Salas indicó que aún no tomarán medidas en ese sentido.

El ministró reiteró que de las personas que han resultado infectadas con el COVID - 19, el 81% solo manifiesta un resfrío leve, mientras que los que presentan una dificultad respiratoria y situaciones más graves son los que tienen otras enfermedades asociadas como cáncer, presión alta, asma, males cardiovasculares, diabetes o porque son adultos mayores.

Agregó que un 1,5% de los infectados no presenta síntomas al inicio (quizá el porcentaje es mayor) por lo que los controles en los aeropuertos no son para impedir que el virus llegue, ya que es probable que se detecte posterior a la llegada al país del paciente.

El gerente médico de la CCSS, Mario Ruiz, insistió que la prevención y la higiene es un asunto de todos.

“Cuando se presentó el AH1N1 hace unos años, la sociedad costarricense se comportó de una forma tan efectiva que bajaron la infecciones tanto dentro como fuera de los hospitales”, aseguró Ruiz.