Este viernes 15 de marzo, a la 1 p. m., se reunirán las fuerzas vivas limonenses en el gimnasio Eddy Bermúdez, ubicado en barrio Roosevelt de Limón para definir las acciones a tomar en pro de contener la crisis por desempleo que acecha al cantón central.
La convocatoria fue hecha por el sindicato de trabajadores de Japdeva y afines portuarios (Sintrajap) ante la decisión tomada por la Federación de Trabajadores de Limón (Fetral) de llamar a todos los sectores sociales a unirse para comenzar la lucha por el bien de la provincia.
“A todos los trabajadores y pueblo en general, ante los graves acontecimientos que estamos viviendo en nuestra provincia y que ya tienen como víctimas a más de mil trabajadores que perdieron su empleo y que amenaza con generar más desempleo sino hacemos nada por detener esta barbarie provocada por el gobierno para favorecer a la transnacional APM Terminals, los invitamos a la reunión de este viernes", se lee en la carta de convocatoria.
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La invitación se extiende a las autoridades locales como al alcalde Néstor Mattis, diputados, exdiputados de la provincia y otras partes del país, líderes y representantes de los diferentes grupos religiosos, comunales, sindicales, culturales, estudiantiles, empresariales, ambientales, profesionales, trabajadores afectados por los despidos y sus familias.
Incluso hacen alusión a lo que califican como una violación a las leyes y soberanía institucional por parte del ministro del Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) en contra de Japdeva y el irrespeto hacia el pueblo de Limón por parte del gobierno de la República y el propio presidente.
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Antonio Wells, secretario general de Sintrajap y Liroy Pérez, secretario de prensa firman la carta y hacen alusión a las palabras del líder comunal y político Marvin Wright Lindo “Calalú” (qdDg) que dicen “Limón es una tierra de enormes riquezas, pero no la disfrutamos todos, de Limón se enriquecen todos, menos el pueblo, se nos llevan todo y nos dejan en la miseria. No tenemos tierras, no tenemos casa, no tenemos trabajo, no tenemos nada. Ya no aguantamos más carga, llegó la hora de Limón”, para apelar al sentimiento de los caribeños.