La fiesta de san Isidro Labrador, patrono de los agricultores, se celebra este 15 de mayo, por eso en varias parroquias del país tienen preparadas misas en su honor.
En estos momentos en que el país y el mundo enfrentan una crisis económica a raíz de los efectos del COVID-19, se hace necesario más que nunca poner las cosechas en las manos de este santo para que las proteja.
La primera misa de bendición de las cosechas y la tierra será este viernes a las 10 a.m. a través del “feis” Ecclesia News, página dirigida por el padre Abraham Abarca de la parroquia de Guatuso de Alajuela.
“San Isidro Labrador fue un labriego sencillo que siendo un humilde trabajador supo dar todo de su parte para agradar a Dios y a su patrón, además para sacar el fruto alegre y abundante de la tierra. Por eso los invitamos para que durante la eucaristía podamos tener parte de nuestras cosechas y un poco de la tierra que cultivaremos para que en su momento podamos hacer un signo y pedir la intercesión de san Isidro para que las bendiga”, explicó el padre Abraham.
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Si a esa hora se le complica unirse, puede seguir otra misa que realizarán a las 6 p.m., la cual transmitirán por el mismo “Feis” Eclesia News y en el de la parroquia Dulce Nombre de Jesús de Tierra Blanca.
En esa celebración también le rezarán a Jesús del Rescate, quien en 1877 protegió las cosechas de los agricultores de Tierra Blanca de Cartago de una plaga de chapulines que las acechaba.
La parroquia de San Isidro de Heredia también tendrá una eucaristía a las 6 de la tarde, la cual puede seguir en la página de Facebook “Parroquia San Isidro Labrador, Heredia”.
“Para mí es un orgullo ser agricultora. Lo que más me agrada es saber que de mis manos sale el pan de cada día de muchas personas, por eso todos los días le doy gracias a Dios por darnos la tierra, los alimentos y este clima donde uno se olvida de todo”, aseguró Julieta Carballo, agricultora de San Isidro de Heredia.
Añadió que hace muchos años el padre Chicho ofreció una misa en el río para pedirle a san Isidro que les enviara agua, ya que estaban pasando por una larga sequía y, terminando la celebración, se vino el aguacero.
“Esas son las bendiciones que nos ha dado san Isidro”, comentó Carballo.