Con las lluvias no solo hay que cuidarse de que no lo pesque un resfriado, sino que con los baldazos también hay que estar pilas para que no lo pesque, pero una sincejas.
Resulta que los expertos en serpientes aseguran que las lluvias provocaron recientemente que en algunas comunidades reportaran encuentros con serpientes.
Un ejemplo de ellos es el de doña Yolanda Morales Soto de 58 años. Ella fue mordida el domingo pasado por una terciopelo mientras disfrutaba del jardín de su casa en Cebadilla de Turrúcares, en Alajuela.
Morales estaba arrancando zacate cuando observó dos gotitas de sangre en su mano derecha y apenas pudo reaccionar.
Eran los dos colmillos de una temible terciopelo que, incluso, se puso tan brava que intentó atacarla de nuevo, pero un sobrino intervino y acabó con la sincejas.
“La prensó con un cuchillo. Estaba tan toreada”, dijo la afectada.
Doña Yolanda, quien es esposa de un conocido copero de esa zona, se empezó a sentir mal, le dio taquicardia y hasta se le durmió la lengua. Ella fue trasladada al Hospital San Rafael de Alajuela.
A la 1 de la mañana se complicó porque una alergia no la dejaba respirar, sin embargo, ya la dieron de alta y está fuera de peligro.
Ella, al igual que muchos lugareños, están asustados por la cantidad de culebras que han matado en los últimos días ahí y en otros pueblos cercanos, pero sobre todo, el susto es mayor con la condenada terciopelo.
“Hasta en los lugares limpios aparecen”, dijo doña Yolanda porque tres días atrás otra terciopelo intentó atacar a un familiar.
Pero doña Yolanda no es la única afectada de esa zona. El 31 de julio doña Mercedes Berrocal fue trasladada al hospital de Alajuela como víctima de otra terciopelo, en calle La Candelaria en San Miguel de Turrucares.
Los vecinos de esa zona han matado varias terciopelos en sus fincas desde que se dieron esos dos episodios.
“Algunos tienen gatos y ellos las alejan entonces no se meten en las casas a quienes tenemos niños nos da mucho temor”, dijo una vecina de apellido González.
Por todo lado
En calle Breña Mora, en San Isidro de Heredia, los vecinos también han reportado frecuentemente, presencia de serpientes en sus propiedades.
Don Rónald Chaves asegura que han visto corales y serpientes loras, además les ha tocado llamar a los bomberos por cascabeles.
“Los vecinos tenemos un grupo de Whats App y es frecuente que comenten que alguna serpiente aparecieron en sus propiedades, hasta comparten fotos, en el invierno es cuando más aparecen en las casas”, dijo Chaves.
Incluso los vecinos de La Uruca aseguran que han encontrado varias serpientes y aunque se asustan muchísimo, siempre son de la especie ratonera (come ratones), que no son venenosas.
Debido a esta situación, le hicimos algunas consultas a Jazmín Arias y Danilo Chacón, expertos en serpientes del Instituto Clodomiro Picado.
–¿En la época de lluvias es más común ver a las serpientes? ¿Por qué?
–Durante la época lluviosa puede haber más avistamientos de serpientes por varias razones: los inicios de época lluviosa están relacionados con nacimientos de serpientes y los finales de época lluviosa están relacionadas con la época reproductiva de los adultos. Además, la época de lluvias fuertes saturan los terrenos de agua y las serpientes se ven obligadas a buscar refugios en lugares secos (bodegas, galerones, talleres, casas, etc). En caso de tener algún avistamiento con serpientes, los compañeros de bomberos serían los encargados de hacer la remoción del animal.
–¿Cómo se puede diferenciar una culebra a una serpiente venenosa, la gente la mayoría de veces reporta que hay una cerca o en una propiedad pero no sabe qué tipo es?
–El término serpiente o culebra es exactamente lo mismo. Pero dentro del vocabulario popular la gente asocia culebra igual a no venenosa y serpiente igual a venenosa. Algunas claves para distinguir una de otra son que las serpientes venenosas poseen escamas del mismo tamaño y de apariencia áspera en todo su cuerpo (desde cabeza hasta cola), mientras las no venenosas poseen unas escamas mucho más grandes en su cabeza, denominadas placas. En el caso particular de las corales venenosas, poseen este tipo de placas en su cabeza, pero se pueden identificar de una no venenosa por su secuencia de colores en sus anillos. Si tienen el orden de rojo, amarillo, negro y amarillo es venenosa y si posee cualquier otro tipo de combinación de colores no es venenosa.
–¿Cuáles son las serpientes más comunes?
Dependería de la zona del país donde se encuentre. Por reportes de serpientes venenosa sería la terciopelo (Bothrops asper su nombre científico), esto es porque tiene un rango de distribución muy amplio, abarcando todo el bosque tropical húmedo hasta los 1.500 metros sobre el nivel del mar y con respecto a las no venenosas es muy difícil, ya que son muchas las especies, pero por nombres comunes la gente reporta las raneras, ratoneras y sabaneras que son de muchas especies diferentes.
–¿En alguna época del año hay mayor reproducción?
Dependiendo de la especie de serpiente, entonces se podría decir que durante todo el año habrán distintas especies de serpientes en reproducción. Por ejemplo, en el caso particular de la serpiente terciopelo inicia su temporada de reproducción aproximadamente en octubre, noviembre y diciembre, teniendo nacimientos en abril, mayo y junio. Mientras esta misma especie para el Caribe iniciaría reproducción en febrero y marzo con nacimientos entre setiembre y noviembre.
–Los vecinos de Turrúcares de Alajuela aseguran que desde hace muchos años les dicen que en esa zona hay terciopelos porque la gente del Instituto Clodomiro Picado las liberaba y luego las recapturaba. ¿Esa versión es cierta?
Esta historia es mas común de lo que se imagina, pero no es únicamente de la zona de Turrúcares, si no que es casi que de todo el país, por nombrar algunos pueblos se cuenta esta misma historia como real en Atenas, Grecia, Puriscal, y en zonas del Caribe y Pacifico Sur. Este relato circula desde inicios de los años 90.
Solo para que se den una idea de lo que se está haciendo en el Instituto, hasta hace aproximadamente seis años se inició con la reproducción en cautiverio, ya que cada vez son menos la cantidad de serpientes venenosas que llegan al Instituto por terceros (propietarios de fincas, etc), porque el personal del Instituto prácticamente no realiza giras a campo a recolectar serpientes y cuando se realizan es con base a la legislación de vida silvestre vigente, la cual prohíbe la liberación o reintroducción de estos animales en estos lugares.
Además, se le consultó a Pablo Vásquez, encargado de Vida Silvestre del Minae, sobre la situación con las sincejas en San José. Él comentó que con las lluvias se ven con mayor frecuencia, igual que otros animales.
“Por día nos pueden alertar de dos a tres casos, hasta más. Lo que pasa es que la gente no sabe diferenciar si son o no venenosas y reaccionan con mucho miedo y temor, es menos frecuente encontrar venenosas, las serpientes andan buscando lugares secos y oscuros para poderse ocultar, cerca de los ríos aquí en San José se encuentran boa constrictor que son las más grandes”, dijo Vásquez.
El experto también asegura que las serpientes huyen de los patios y corredores limpios, más bien buscan ocultarse en tierra y estar seguras.
Para que se haga una idea, los bomberos atendieron el año pasado 3.729 incidentes relacionados a sincejas, sobre todo de gente que avisa que hay una en su propiedad y pide ayuda para que se la lleven. En lo que va de este año se cuentan 2.273 casos.