Sucesos

Esposa de mecánico: “No sabemos si llorar porque murió o porque lo tienen (secuestrado)”

Mateo Marín Chinchilla desapareció de forma misteriosa el viernes 29 de abril cuando se dirigía a su trabajo en Corredores, en la zona sur

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Mateo Marín, mecánico desaparecido en Corredores. Foto cortesía.

Yalicsa Fonseca vive agobiada por la incertidumbre de no saber qué fue lo que realmente pasó con su esposo, Mateo Marín Chinchilla, quien desapareció misteriosamente la mañana del viernes 29 de abril de este año.

El jueves 29 de junio se cumplieron dos meses de su extraña desaparición, con cada día que pasa aumentan las preguntas y no aparece ni una sola respuesta.

“Estamos como en el limbo, no sabemos si llorar porque murió o llorar porque está vivo y lo tienen (secuestrado), la incertidumbre es lo peor que le puede pasar a uno”, dijo Fonseca a La Teja.

Marín, de 29 años, y quien se gana la vida como mecánico, fue visto por última vez la mañana del viernes 29 de abril en La Cuesta de Corredores, en la zona sur del país. Ese día fue a dejar a su esposa al trabajo y se despidió de ella con un beso, tal y como siempre lo hacía.

Yalicsa contó que Mateo trabaja en un taller mecánico que está unos cinco o seis kilómetros de distancia de su trabajo, por lo que usualmente llegaba muy rápido, pero al ver que las horas pasaban y aún no había recibido un mensaje de él, la hizo pensar que algo malo había pasado.

Al momento de la desaparición, el mecánico conducía su carro, un Jeep Wrangler modelo 1997, negro mate y con placa BVL606.


—  “Hasta el momento no nos hemos dado cuenta si tuvo algún problema o si pasó otra cosa, todo estaba normal”, dijo Yalicsa Fonseca, esposa de Mateo.

Sin pistas

Pese al tiempo que ha pasado y al esfuerzo que han hecho los seres queridos de Mateo, al día de hoy no hay ni una sola pista clara de lo que pudo pasar con él ese día.

Mateo Marín, mecánico desaparecido en Corredores. Foto cortesía.

“Hasta el momento no tenemos ninguna noticia, no sabemos absolutamente nada, lo mismo de siempre, en el OIJ no hay nada diferente desde que comenzó todo.

“El papá de Mateo le preguntó la semana pasada a uno de los investigadores, pero este le dijo que no tenían noticias, que todo seguía igual”, comentó Yalicsa.

Como en todo caso de desaparición, durante los primeros días la familia del mecánico recibió llamadas y mensajes, casi todos con información falsa, pero conforme han pasado las semanas, las llamadas han cesado.

“Al principio sí (llamaban), incluso me contactó un muchacho que decía que lo habían visto caminando en medio de San José, hasta fotos y todo me mandó, incluso le dijo a la Policía que investigara, pero luego se dieron cuenta que esa persona no era Mateo”, explicó la esposa del mecánico.

Otra situación que le parece muy extraña a la familia es que hasta el momento el carro de Mateo no ha aparecido, y al parecer ese día nadie lo vio, es como si se lo hubiera tragado la tierra.


—  Si usted sabe algo sobre este caso puede comunicarse con Yalicsa al teléfono 8313-0791 o con el OIJ al teléfono 800-800-0645 o al Whatsapp 8800-0645 del Centro de Información Confidencial.

Días muy difíciles

Desde la desaparición de Mateo, la vida de Yalicsa y de toda su familia cambió radicalmente, pues no hay un solo momento del día en el que no piensen qué fue lo que pasó con él.

“Es bastante difícil, desde que pasó eso no he vuelto a trabajar, yo soy enfermera y me la he pasado incapacitada, porque la verdad yo no quiero volver a trabajar, no quiero volver al estrés todavía.

La vida le cambia a uno un montón, igual a los papás de él, es muy duro, no poder dormir por las noches, tener que recurrir a algún medicamento para poder conciliar el sueño, porque la mente no para de pensar en tantas posibilidades”, explicó Fonseca.

Yalicsa dijo que cada día tratan de encontrar una respuesta para lo que pasó, sin embargo, todo es muy confuso, pues Mateo era un hombre tranquilo, que no tenía problemas con nadie.

“Cuando aparece alguna noticia de que encontraron a alguien que falleció y no saben quién es, uno está con ese estrés y con el susto de si nos llaman o no, de que si apareció o no, es feo, es horrible”.

Adrián Galeano Calvo

Adrián Galeano Calvo

Periodista de Sucesos y Judiciales en el periódico La Teja desde 2017. Cuenta con un bachillerato en Relaciones Públicas de la Universidad Latina y una licenciatura en Comunicación de Mercadeo de la UAM. En el 2022 recibió el premio a periodista del año del periódico La Teja.

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