Suena sorprendente, pero es real. Veinte delincuentes tuvieron que ponerse de acuerdo para llevar a cabo el secuestro de una empresaria china por la cual pidieron un rescate de $200.000 (más de ¢123 millones) y aunque eran tantos el plan les salió mal.

La bandota fue desarmada este martes por el OIJ gracias a un megaoperativo que incluyó 15 allanamientos hechos en lugares de Cartago como Quircot, Caballo Blanco y Taras e incluyeron localidades josefinas de Coronado, barrio Córdoba y el barrio Chino.

Como resultado del operativo la Policía Judicial detuvo a 11 hombres de apellidos Aguilar Mata, Cen, Castillo Aguilar, Rojas Brenes, Morales Picado, Serrano Araya, Morales Moya, Bejarano Leitón, González Hidalgo, Méndez Fernández y Núñez Núñez. También agarraron a un menor de edad.

A estos se suman cinco hombres de apellidos Brenes Guillén, Cordero Montoya, Jiménez Calderón, Obando Corrales, Méndez Zamora y una mujer de apellidos Gamboa Garita detenidos por el OIJ el 4 de octubre de este año, día en el cual se rescató a la empresaria secuestrada.

Pese a que ha agarrado a tanta gente, el OIJ dio a conocer que aún falta detener a dos sospechosos; se trata de Jeffry de Jesús Bejarano Leitón y Miguel Arturo Segura Quirós.

¿Cuántos más mejor?

Cristian Montenegro, jefe de la Sección de Crimen Organizado del OIJ, explicó que los 18 detenidos están embarrados en el secuestro de la empresaria ocurrido el 30 de setiembre de este año. La mujer estuvo retenida en tres casas de Cartago durante cinco días.

La liberaron ilesa en un centro comercial de Escazú.

Los maleantes lograron sacarle a la familia de la mujer un pago de ¢11 millones, pero les indicaron a los parientes que si querían ver de nuevo a la mujer tendrían que hacer un segundo pago de $20.000 más (más de ¢10 millones). Fue durante este último pago que el OIJ logró rescatar a la china y detener a seis de los miembros de la banda en Escazú.

En cuanto a la enorme cantidad de personas que formaban la banda, Montenegro dijo que se podría pensar que ellos creyeron que cuantos más fueran mejor saldrían las cosas pues iban a tener más control de las etapas del secuestro.

“En un grupo criminal dedicado al secuestro se dan diferentes acciones, por ejemplo, el ‘levante’ (detener a la persona), el cautiverio, el cobro del dinero y la eventual liberación. Por lo tanto, al ver la cantidad de personas se podría pensar que esta estructura tenía bastante poder y dominio de estas áreas”, explicó Montenegro.

El funcionario añadió que como la banda vio que estaba difícil conseguir los $200.000 decidió bajar el monto del rescate y fue por esto que decidió solicitar dos pagos en efectivo.

Conocido la “vendió”

Montenegro detalló que en la banda lograron identificar a dos líderes. Uno era el hombre de apellidos Aguilar Mata y el otro un empresario oriental de apellido Cen y conocido como “Chino Cen”.

“Aguilar es una persona muy violenta, dentro de la investigación incluso tenemos que usó armas de fuego para disparar contra unidades policiales, mientras que el Chino Cen es un líder más estructurado y que no tenía una participación de forma operativa sino a nivel de dar órdenes”, explicó.

Según el jefe judicial, el Chino Cen, dueño del bar y restaurante Paradise, en el barrio Chino, fue la mente maestra detrás del plan de secuestrar a la mujer pues, en apariencia, tenía una relación cercana con la familia de ella.

“Lo que tenemos es que tenía una relación con la familia y por eso tenía un conocimiento de los negocios que la persona podía tener ya que las víctimas son comerciantes importadores. Esta persona (Cen) fue la que facilitó la información y tuvo una participación activa al escoger a la víctima”, añadió.

Montenegro añadió que durante los allanamientos decomisaron más de 700 municiones de distintos tipos de armas como escopetas y pistolas nueve milímetros; además encontraron tres rifles y varias dosis de marihuana.

Si usted tiene información sobre el paradero de los sujetos que aún no han sido detenidos puede comunicarse con el OIJ al teléfono 800-8000645 o al WhatsApp 8800-0645 del Centro de Información Confidencial.