Al ingeniero de apellidos Morales Vega, de 25 años; su novia apellidada Solís Chaves, de 24, y a la mamá del sujeto, de apellidos Vega Aguirre, de 45 años, les cambiaron los paseos por Cuba y España por tres meses de prisión preventiva en Costa Rica.
Los tres llegaron el miércoles por la noche provenientes de ese país europeo, donde habían sido arrestados el 11 de enero pasado.
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Esta medida se las dictaron este viernes en el Juzgado Penal del II Circuito Judicial de San José por considerarlos sospechosos del secuestro del comerciante estadounidense William Sean Creighton Kopko, conocido como Tony, quien está desaparecido desde setiembre del 2018.
La Fiscalía Adjunta de Narcotráfico y Delitos Conexos deberá continuar con la investigación en la que, además, figuran otros nueve sospechosos.
Entre estos la abuelita del ingeniero, de apellidos Aguirre Leal y de 71 años; el tío identificado como Vega Aguirre; así como dos hombres apellidados Martínez Chacón y Ford Dowman, y una mujer Sanabria Abarca. Tres de ellos hablaron con La Teja y afirman ser inocentes.
El comerciante extranjero desaparecido es dueño de un sportsbook (casa de apuestas) en el país y su familia asegura que los vieron por última vez el 24 de setiembre del año pasado, desde entonces el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) lo anda buscando.
Las autoridades presumen que el ingeniero detenido habría ideado un plan para secuestrar al comerciante, en el que en apariencia habría utilizado oficiales de Tránsito y, al parecer, hasta la casa de la abuela para esconderlo, no obstante todo esto es parte de la investigación.