Un niño de 10 años murió la madrugada de este martes al recibir un balazo en la cabeza mientras dormía en un sillón en la sala cuando se dio un tiroteo.
El violento ataque ocurrió en barrio Los Sauces, a 150 metros oeste del salón comunal, en Guararí de Heredia.
Al parecer, los pistoleros llegaron a cobrar venganza contra un integrante de la familia del pequeño, sin embargo, esta versión no ha sido confirmada por el OIJ.
Las autoridades se dieron cuenta de la fatalidad a las 3:30 a. m. cuando los papás del pequeño llegaron en carro al hospital San Vicente de Paúl, en Heredia, pidiendo ayuda, pero lamentablemente el menor ya había fallecido.
Los vecinos afirmaron que escucharon varios disparos, sin embargo, no vieron a nadie y 40 minutos después de la balacera se percataron que el chiquito estaba herido en la cabeza y en el tobillo izquierdo.
De acuerdo con las autoridades, en el rancho donde vivía el menor se ven al menos 13 huecos por las balas. El pequeño resultó ser el inocente que pagó con la vida, los vecinos estaban asustados y solo una señora recordó que el menor era muy juguetón y simpático, incluso dijo que lunes en la tarde estuvo jugando con los vecinitos del barrio.
Debido a la gravedad de la situación, la Fuerza Pública custodió la única entrada al barrio. Los agentes del OIJ llegaron pasadas las 6 a. m. al lugar y durante la tarde el OIJ indicó que no darían declaraciones por ser la víctima un menor.
Al parecer mataron a un vecino
Algunos lugareños que prefirieron no identificarse mencionaron que un hermano del niño estaría involucrado en una riña donde habrían asesinado a otro hombre de una puñalada, sin embargo, la oficina de prensa del OIJ no no confirmó que esta versión sea cierta.
Las autoridades mantienen el caso abierto y hasta el momento no hay sospechosos detenidos.