El piloto Eladio Salazar Barrionuevo, de 33 años, tendrá que pasar unas tres semanas en el Hospital del Trauma luego de resultar herido cuando la avioneta en la que iba cayó al cañón del río Virilla, cerca del puente de La Platina.

Él sufrió golpes en la cara; la mandíbula (ahí tuvieron que ponerle unas puntadas), la columna y una fractura expuesta en el tobillo derecho, esa es la más grave de las lesiones.

Los médicos del centro médico dijeron que le pusieron a Eladio un soporte externo en el pie afectado para que fortalecer los tejidos y se espera que en los próximos días se le haga a una operación para dejarlo puras tejas.

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Salazar está consciente y con buen ánimo, los doctores también contaron que ha soportado muy bien el dolor de los golpes que sufrió.

El copiloto que viajaba con Eladio, Miron Esteban Castro Marín, de 22 años, también está estable. Él también fue llevado este lunes al Hospital del Instituto Nacional de Seguros (INS), pero según se supo después los familiares lo pasaron a un hospital privado.

Edwin Castro, papá del copiloto, dice que ve como un milagro lo que le pasó a su muchacho.

“Gracias a Dios no tiene fracturas, está en observación y es posible que le den hoy mismo de alta, gracias a Dios no pasó a más, solo el susto”.

Castro es jefe de operaciones de la Policía Metropolitana de San José y apenas se enteró del accidente se fue corriendo a ayudar a rescatar a Miron.

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Gran emergencia

La emergencia en la que resultaron heridos los dos hombres ocurrió este lunes a eso de las 9:20 de la mañana. Ellos habían salido del aeropuerto Tobías Bolaños con destino a Quepos, pero cuando se acercaban al cañón del río Virilla, en el conocido puente de La Platina, tuvieron problemas y cayeron.

En pocos minutos llegaron hasta el lugar del suceso los bomberos, personal de la Cruz Roja, la Fuerza Pública y empresas privadas que estabilizaron a los hombres y los llevaron a recibir atención médica.

Aunque aún no están claras las causas del accidente, pareciera tratarse de un daño mecánico.