Los mamulones del Servicio Especial de Respuesta Táctica (SERT), del OIJ, cuentan ahora con una compañera nueva que los protegerá de los maleantes que se escondan para atacarlos a traición.

La compañera nueva es especial, se trata de una perrita llamada Dasha y la primera peludita que se incorpora a esta unidad de choque que, por lo general, realiza allanamientos de alto riesgo.

Alejandro Castillo, jefe de la Unidad Canina del OIJ, contó que Dasha, de la raza pastor alemán y de color gris sable, forma parte de un proyecto que lleva a cabo la Policía Judicial para dotar al SERT de al menos tres perritos más.

“El proyecto dura más o menos dos años, actualmente la perra tiene un mes y una semana de estar entrenándose porque debemos crear un vinculo con el personal del SERT, un vínculo con el tipo de trajes y armamentos que (los agentes) manejan, ya que el perro debe distinguir a la personas que debe atacar”, contó Castillo.

Castillo añadió que Dasha, que tiene un año y siete meses, llegó al OIJ gracias a una donación de la Embajada de Estados Unidos e indicó que tiene un valor de $8.000 (casi ¢5 millones), esto sin tomar en cuenta los costos de su entrenamiento.

Escudo peludo

El jefe de la Unidad Canina explicó que a Dasha se le está enseñando a obedecer órdenes y a atacar a mordiscos, pero destacó que este no será su principal trabajo a la hora de salir con el SERT.

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“La perra va a funcionar como escudo y protección para los compañeros, la tarea principal no es el ataque como tal sino el localizar personas que estén atrincheradas o escondidas en algún sitio peligroso para disminuir el peligro hacia los compañeros”.

Además está siendo entrenada para la búsqueda de armas de fuego e indicios balísticos, pero sobre todo para darles mayor seguridad a los agentes.

Así con los agentes del SERT cuentan con un traje de protección especial Dasha también tendrá el suyo; según Castillo ya están planeando cómo va a ser el que llevará.

“La idea es darle a los canes una protección adecuada por medio de chalecos antibalas e incluso hay que valorar el uso de lentes especiales, pero primero debemos probarlos, porque en el trópico tiende uno a sudar y hay humedad en el ojo, los canes no sudan pero si tienen humedad en el ojo, entonces debemos valorar si se les podría empañar el lente”, añadió.