Una porteña de la pura cepa, nacida en el corazón de Puntarenas, fue la feliz ganadora de nuestro código de la suerte el pasado miércoles 19 de setiembre. La afortunada se llama Xinia Moreira y todavía está tan llena de emoción que nos dijo que no terminaba de creer que se había ganado tres tejitas.
El premio es de ¢150.000 en una tarjeta de regalo y un certificado canjeable en Münkel Centro Médico, el cual consiste en un Paquete de Salud por ¢150 mil, incluye masaje terapéutico, servicio de dentista para limpieza dental y hasta tres calzas, exámenes de sangre (hemograma) y consulta médica.
“Esta alegría la esperaba hace mucho porque soy una fiel activadora, yo desayuno cafecito y La Teja, no me puede faltar porque si no, no me sabe el café. Mi hermano (Jorge Moreira) es quien la compra y doña y yo la activo", dicen doña Xinia.
Tiene 19 años de vivir en Pavas, en la zona que se conoce como La Johnson, pero jamás se le ha salido de su corazoncito su amada Perla del Pacífico, por eso de inmediato comenzó a recodar (doña Xinia tiene 54 años), aquellos días cuando tenía menos de cinco años y ya andaba atrapando camarones y metiéndose en el manglar a sacar chuchecas, además, de pescar buen pargo rojo.
A Pavas se trajo todo el sabor porteño, por eso su cuchara es una de las más buscadas ahí por La Johnson, porque doña Xinia hace una sopa de mariscos que levanta hasta los muertos. Ella le echa leche porque asegura que así sabe mejor, pero el secreto, dijo, es echarle la cantidad exacta de leche para que no quede ni muy muy ni tan tan.
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Pero, también le quedan celestialmente sabrosos los ceviches de Corvina, que para ella es el mejor pescado para hacer ceviche, y el de camarones. De hecho, ella disfruta más el de camarones, asegura que el saborcito es especial, como especial es el pescado frito que ella hace, sobre todo si es un buen pargo.
Seguirá activando porque ahora que la suerte le sonrió, está segura que volverá a pegar nuestro código de la suerte. Para los más agüizoteros, esta lechera nos dijo el número que comenzará a jugar en la lotería: el 47… ahí se la dejamos picando dentro del área.