Pérez Zeledón le apagó la sonrisa a Saprissa y le quitó una posibilidad de romper gran récord

Un agradable y combativo Pérez Zeledón se paseó en todos los saprissistas que estaban listos para sacar pecho con un nuevo récord: el de los catorce triunfos al hilo. Los Guerreros del Sur se pararon firme y derrotaron a Saprissa 1 a 0 este jueves en el estadio Municipal de Pérez Zeledón, en medio de un ambientazo.

El gol fue de Josué Mitchell, al minuto 61, quien no sólo frenó el récord morado, sino que apeó al tricampeón del primer lugar y le propinó la primera derrota del Clausura 2024.

El largo camino de Saprissa ganando se quedó en 13 partidos, igual que los conseguidos por Alajuelense en la temporada 97-98. Se inició el 17 de octubre del 2023, con un triunfo ante Puntarenas por 4 a 1.

Luego pasaron, Cartaginés, San Carlos, la Liga, Liberia, Pérez Zeledón, Grecia, Santos, Cartaginés dos veces (semifinal del Apertura 2023), Herediano dos veces (final del Apertura 2023) y Puntarenas.

Pérez no se acomplejó, ni se asustó con esos 13 partidos consecutivos ganados por la S. Mostró orden defensivo, solidaridad en los recorridos y coraje por montones. No tuvo la bola en su poder mucho tiempo, pero cuando la tuvo y pudo ir al ataque, lo hizo con criterio y peligro.

Así se le juega a Saprissa, así debe jugar siempre Pérez Zeledón. Por algo el apodo de Guerreros del Sur. Los dirigidos por Géiner Segura no dieron una bola por perdida, apegados al discurso del técnico, quien ha dicho tantas veces que los pueden superar en fútbol, pero no en actitud y su equipo le cumplió al pie de la letra.

A Saprissa lo equilibraron con esa actitud. El cuadro de Vladimir Quesada tuvo lapsos buenos, encimando al rival, buscando el marco, rematando, centrando, llegando al área, pero también tuvo que sacar agua del bote y Kevin Chamorro, el portero, se tuvo que emplear a fondo en algunas jugadas.

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Pero no pudo contener la furia guerrera y al 61, Mitchell lo venció de cabeza, luego de un centro de William Fernández al que no le llegó ni Pablo Arboine, ni Klíver Gómez.

Chamorro ya había salvado al Monstruo antes, como cuando sacó un cañonazo de Creichel Pérez a la media hora de juego, luego de una acción individual de Diego Sánchez.

Minutos después, un centro de Cardel Benbow cerró feo y el guardameta morado tuvo que dar un par de pasos atrás y meter la mano para evitar el gol.

Segundo. En el complemento, el portero morado siguió fajado, pues se lució en un potente remate de Mitchell, que contuvo a duras penas a los 52. Y otro de Creichel, al 68, cuando ya perdían el compromiso y Pérez mostraba sus mejor traje, ese de guerrero.

También sacó un cañonazo de Fernández, al 75, que significaba el 2 a 0.

Saprissa tuvo las suyas, primero al 53, cuando Ariel Rodríguez perdió un pulso solo contra el portero Jussef Delgado, o cuando Javon East no pudo enderezar un centro de Luis Díaz.

El Monstruo lo buscó por todos lados, hasta metió a un Mariano Torres que estuvo en banca para cuidarlo por la cancha. El argentino casi empata con un tiro libre, pero la noche era de Pérez Zeledón, la noche fue guerrera. Ya hacía falta.