Saprissa salió vivo de Limón pero no coleando. El cuadro de Vladimir Quesada apenas pellizcó un punto ante Limón tras empatar (1-1) y le salió barata la visita porque estaba para que regresara a Tibás con las manos vacías.

El Monstruo, con estas dos unidades que dejó en el Juan Gobán le pierde el paso a Alajuelense en la lucha por el liderato pues ahora los erizos están a tres puntos de distancia, cuando amanecieron el domingo a un punto de distancia.

Únicamente quedan por disputarse tres jornadas en esta fase regular del apertura 2018.

Basta con decir que Dexter Lewis, el portero caribeño, fue el espectador más cerca que tuvo la mejenga, porque en realidad fueron contadas con los dedos de una mano, y sobran dedos, las oportunidades de peligro con las que le llegó el cuadro visitante.

Caso contrario de Kevin Briceño, quien tuvo que fajarse, volar de un lado a otro para que no le llenaran el saco.

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Al minuto 12 la Tromba del Caribe se comió el primero, esta vez fue Keyder Bernard, quien recibió la bola sin marca y puesta como con la mano en un centro de Miguel Marín, pero su cabezazo no tuvo fuerza y le cayó en las manos a Briceño.

Solo seis minutos después el portero morado le volvió a ganar el duelo a Bernard cuando el limonense probó de media distancia.

Parecía que Kevin llegaba en su día de suerte pero no fue así, porque al minuto 32 pitaron una falta frente al área, la pecosa la agarró con confianza Ryan Bolaños que se cuadró, apuntó y disparó directo al ángulo por encima de la barrera y golazo para abrir el marcador.

Ya con el uno por cero no le quedaba de otra a los saprissitas que apretar un poco, tampoco fue que se fueron encima del rival pero le pusieron más.

Y fue al minuto 40 cuando Christian Bolaños iba con la bola hacia el marco, Dexter achicó pero mientras agarraba la bola le tiró los pies al volante del Sapri y Keylor Herrera no dudó en pitar el penal.

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El encargado del cobro fue Michael Barrantes, que con gran categoría la tiró al lado derecho del portero, el balón pegó en el palo y entró para poner el uno por uno.

Ya no hubo tiempo para nada, solo para un pleito después del pitazo entre Jairo Arrieta y los limonenses que al final no pasó a más.

Se fueron en blanco

Para los segundos cuarenta y cinco minutos la Tromba le metió ganas, pero faltó suerte.

Briceño se agrandó y frenó al 47 una clarísima de Edder Nelson, quien nunca supo qué hacer con el achique del morado.

Al 62 se empezaron a calentar los locales porque pedían penal en una jugada de tiro de esquina.

Pero cuando estallaron fue al 82. Herrera les anuló un gol mal anulado, Edder se fue solo y anotó incluso cayéndose, pero le sancionaron un fuera de lugar inexistente.

El caribeño sí estaba metido, pero el balón no se lo pasó un compañero, sino que fue una devolución de Alejandro Cabral por lo que estaba completamente habilitado para hacer el gol.

Se enredó Keylor y su asistente número dos, Luis Granados, quienes nunca detallaron quién mandó la bola hacia atrás.

Para el cierre, Briceño tuvo que volar otra vez, porque Bolaños casi le clava otro tiro libre igual al del primer gol.