EscucharLa novela con tintes a serie de televisión del defensa Henry Figueroa agregó un nuevo dato, luego de que en Honduras presumen que las balas que recibió el domingo mientras manejaba su carro fueron para robarle su chuzo o extorsionarlo.
Según el canal hondureño Televicentro, este podría haber sido el móvil para hecho delictivo que vivió el exjugador de Alajuelense al que, presuntamente, le dispararon cuatro veces desde una moto.
“Son las once de la noche, la zona , el lugar solo a esa hora, posiblemente, sea el móvil el quererle robar el carro”, señaló el criminólogo y profesor universitario Gonzálo Sánchez, entrevistado por el medio de comunicación catracho.
Por otra parte, Jair Meza, director de comunicación estratégica de la policía hondureña, comentó que están recabando toda la información posible para determinar realmente qué pasó y quiénes fueron los autores.
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Figueroa ha sido el protagonista principal de un novelón que arrancó el 8 de diciembre al decir que se le había muerto la mamá-abuela y evitar así un control antidoping luego del partido de vuelta de la final de segunda fase, ante Herediano.
El 27 de diciembre, el futbolista dijo al Diario Diez de su país que nadie había muerto, que todo había sido un mal entendido y su familia estaba amenazada.
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El 24 de diciembre, Alajuelense anunció la rescisión de contrato argumentando que el futbolista se tomó seis días y no dos, como le habían aprobado, para ir a Honduras luego de la muerte que nunca pasó y este domingo corrió la noticia de un supuesto atentando mientras conducía por las calles catrachas.
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Este martes se espera que la Comisión Disciplinaria de la Fedefutbol dé a conocer el castigo impuesto al futbolista por no hacer la prueba doping.
