Federico “Kiko” Robles, expresentador de televisión, ya fue operado este lunes y es de sorprenderse el objeto que le sacaron de su estómago.
La exfigura de Teletica y Repretel llevaba más de un mes esperando esta cirugía, luego de que en mayo se empezara a sentir mal de salud sin saber qué le estaba pasando.
Según nos contó en aquella ocasión, le daban unos dolores o punzadas muy fuertes, y después de una gastroscopia que le hicieron, descubrieron que tenía algo atorado en la zona del esófago.
“Hace muchos años me sacaron la vesícula y cuando la quitan ponen unos clips para cerrar esa zona; dichos clips son parte del cuerpo, ahí se quedan, pero como yo había estado con un bypass todo se adelgazó, y 20 años después, aparentemente, se soltaron esos clips y empezaron a dar vueltas en el cuerpo”, nos explicó en junio pasado.
Este 28 de julio, por fin, ya pudieron operarlo y su esposa, Ana María González, nos confirmó que todo salió muy bien y que la exfigura de Combate se encuentra recuperándose de la anestesia.
“Estamos desde las 7 a. m. en la clínica y bueno, ya le sacaron el objeto ese extraño que tenía, que estaba enganchado entre el estómago y el intestino”, nos confirmó su esposa.
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Desde que Kiko empezó con las molestias en su estómago, lo mandaron a tener una dieta blanda, porque en cualquier momento le programaban la cirugía; sin embargo, no fue hasta ahora que lo pudo operar el mismo médico que le hizo el bypass gástrico hace 19 años.
“Esos eran los episodios que él tenía desde el 9 de mayo, que teníamos que llamar a Emergencias Médicas continuamente; unos episodios de dolor, de punzonazos de gastritis que eran algo más y eso era, ese era el peligro. Bajó 16 kilos justamente porque no podía comer normal, tenía que estar con una dieta blanda mientras los médicos decidían cuál era la mejor manera de operarlo. Fue tremendo porque eso estaba colocado entre el estómago y el intestino, y si eso se corría del intestino por comerse un pedazo de carne, le abriría el intestino al medio y hasta ahí llegó”, señaló su esposa.
Ella agregó que, según lo que le explicó el doctor, dicho objeto fue como una especie de grapa que le pusieron cuando le hicieron el bypass y que con los años se desprendió.
“Hace 19 años en las operaciones del bypass se ponía una malla que envolvía el estómago con el esófago y el intestino apretaba todo y le ponían esa arandela, ese gancho y se suponía que esa argolla se tenía que deshacer o desintegrar, y resultó ser que esa argolla no se desintegró, emigró y quedó enganchada entre el estómago y el intestino, que fue ahora que la descubrimos, vaya a saber dónde estuvo los otros años porque no le había pasado nunca antes un episodio así”, dijo González.
Nada de mala praxis
Horas más tarde Kiko fue dado de alta y conversó con nosotros mientras descansaba en su casa.
El también exlocutor de la emisora 103 dijo sentirse muy bien y, sobre todo, tranquilo al saber que ya le pudieron sacar el objeto que tenía en su estómago.
“Ya aquí, en casa, todo en paz, todo en calma, todo salió bien. Todo parecía más grave de lo que de repente es”, mencionó apenas lo contactamos.
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Kiko explicó que el objeto o argolla que le sacaron no se la dejaron en su cuerpo por una mala praxis, como estuvo leyendo en comentarios de redes sociales, ni porque el doctor que le hizo el bypass gástrico hace 19 años, o el que lo operó de la vesícula años atrás, se lo dejaran ahí por error.
Simplemente, fue que a él no se le deshizo dicho material, cosas que pasan muy pocas veces en procedimientos así.
“Estaba leyendo comentarios que la gente estaba poniendo que una mala praxis, que Dios guarde esa clínica, los doctores. Es que nada tienen que ver los doctores, nada tiene que ver la clínica, fue un tema de los materiales que se usaban y que se deshacen; bueno, sí se deshacen. Al noventa y pico de la gente se le deshizo el material y 20 años después se dieron cuenta de que a mí no, y ya, paz y calma.
“No hubo nada, pudieron sacarme la argolla sin problema y me hicieron la gastroscopia, me hicieron colonoscopia, me revisaron el intestino, revisaron el colon y todo perfecto, todo bien”, dijo.
A seguir a puro líquido
Por ahora una de las indicaciones médicas que debe de seguir, además de guardar reposo, es seguir con la dieta líquida o blanda unas horas más para que el aparato digestivo empiece a trabajar de nuevo con normalidad después de 24 horas de operado.
“La argolla estaba muy, muy enganchada, entonces tuvieron que cortar y cauterizar porque no quería ceder”, contó muy tranquilo al saber que todo salió mejor de lo planeado por el doctor.
Robles, además, contó que la operación se atrasó unos días porque el instrumento para sacar el objeto era especial y se demoró un poco en llegar al hospital.
Ahora lo que le tocará es alimentarse muy bien apenas pueda para recuperar todo el peso que perdió estos días que lo tuvieron a pura dieta blanda.