Ya no hay vuelta ni reconciliación alguna. Tom Brady y Gisele Bündchen ya tienen abogados para su divorcio, según indicaron varias fuentes a la página Page Six.
Tras varios meses de rumores de vivir una grave crisis matrimonial, que además los tiene separados, la pareja ya habría optado que lo mejor es vivir cada quien por su lado.
La exmodelo decidió separarse luego que Brady aceptara continuar con su carrera como jugador de fútbol americano cuando ya le había prometido que se dedicaría su tiempo a la familia.
“En realidad, nunca pensé que esta discusión sería el final de ellos, pero parece que lo es”, le dice una fuente al tanto a Page Six. “Ambos tienen abogados y están analizando lo que implicará una separación, quién se queda con qué y cuáles serán las finanzas”.
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Fuentes cercanas al siete veces campeón del Super Bowl, de 45 años, y la supermodelo brasileña, de 42, dicen que ambos están muy involucrados en la crianza de sus hijos y compartirían la custodia.
La pareja tiene un hijo Benjamin, 12 de años, y una hija Vivian, 9, mientras que, Brady también es padre de Jack, de 15 años, que tuvo con su ex Bridget Moynahan.