La máxima representante de la belleza costarricense, Natalia Carvajal, viajó a Tailandia para luchar por la corona de Miss Universo 2018 y va con una cantidad de maletas que impresiona.

La miss Costa Rica fue despedida ayer por un gran grupo de ticos que llegaron al Juan Santamaría para desearle lo mejor en el certamen de belleza cuya final será el próximo domingo 16 de diciembre.

Natalia llegó al aeropuerto acompañada por su novio, el piloto André Solano, con el que, por cierto, tiene más de un año de vivir.

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André contó que estos últimos días han sido de puras carreras incluso para él pues le tocó acompañar a Naty a recoger vestidos de gala, el traje de fantasía (que no quiso revelar cómo es), los zapatos de los patrocinadores y ayudarle a alistar maletas. Al final la guapa viajó con siete valijas de las grandes.

“Siempre hay detalles que se quedan de última hora, entonces ha sido un poco complicado, pero ella se preparó muy bien. Todos los días trabajó bastante para ir bien preparada y sé que le va a ir muy bien”, dijo muy enamorado el piloto de carros de carreras.

Solano también mencionó que tanto él como sus suegros viajarán a Tailandia, el próximo 9 de diciembre para estar en la gran final del día siguiente. Tienen planeado quedarse varios días y pasar la Navidad por allá.

Despedida muy criolla

Natalia llegó al aeropuerto minutos antes del mediodía y tuvo un recibimiento muy tico. La estaban esperando el grupo de danza fólclorica y la comparsa La Charanga, de San Rafael Abajo de Desamparados, y un grupo de mascaradas.

La reina de belleza no tenía idea de semejante recibimiento y al bajar del carro de su novio se llevó el sorpresón al ver el molote.

“No puedo describir lo que siento, tengo muchas emociones encontradas. Hay demasiados sentimientos pasando por mi mente en este momento, le agradezco a toda la gente que vino, el calor y el amor que me han dado, ha sido increíble. Voy a ir a darlo todo y a dejar el nombre de Costa Rica en alto, les prometo que voy a dar lo mejor y agradezco a la gente que me ha apoyado en las redes sociales y a los que simplemente han creído en mi”, dijo Natalia.

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La miss contó que en las maletas lleva recuerditos típicos hechos por artesanos de Sarchí para regalárselos a sus compañeras de cuarto y a algunos de los organizadores del concurso.

“Tengo como tres días de no dormir, anoche (lunes) pasé recto alistando maletas. Ha sido una locura, pero no me importa, me voy feliz y con este recibimiento me voy con el corazón más lleno. Me siento lista para gritar ese ‘¡Costa Rica’! con más ganas”.

Lizandro Porras, presidente de la Asociación Rescate de Valores y Tradiciones Culturales de San Rafael Abajo de Desamparados (a la que pertenecen la comparsa y el grupo folclórico), contó que llegaron a despedir a Naty porque ella ha hecho varios trabajos de obra social con ellos y la quieren mucho.

Último detallitos

El diseñador George Bakkar, el mismo que fabricó la corona que ganó Natalia en abril pasado, también la estaba esperando en la entrada de abordaje del aeropuerto para entregarle unos aretes muy especiales que le tuvo que hacer de última hora.

“Me pidió que le hiciera unos artes rosados para un vestido especial y que tuviera una inspiración con el agua y la naturaleza, entonces le hice unos en espirales que representan el movimiento y la pieza de plata que tiene adentro es como una cascada. La otras piezas también tienen una parte rosada y una de plata que son como una roca del agua”, dijo el diseñador.

A la terminal aérea también llegaron amigos de la guapa presentadora de televisión, entre ellas, la exmiss Costa Rica Carolina Rodríguez, quien le aconsejó disfrutar mucho la experiencia.