El juego mata el miedo de su perrito a la pólvora

La reventadera de bombetas en cualquier momento, o durante las fiestas de fin y principio de año, es un martirio para los perros y todavía falta lo peor, el 31 de diciembre, cuando el asunto se pone furioso y prácticamente en todo el país se revienta tal cantidad de pólvora que desespera a los peluditos a tal punto que hasta pueden morir.

La gran receta para evitar que nuestros perritos sufran es que nos pongamos bien chirotes con ellos para que así entre juego y juego se desentiendan del escándalo de la pólvora y se les baje el estrés que, como bien lo confirma el Colegio de Veterinarios de Costa Rica, puede ocasionarles taquicardia (corazón acelerado), desorientación, náuseas, aturdimiento, miedo y hasta la muerte.

José Castillo, adiestrador profesional de perros de la escuela de adiestramientos El Valle, nos pasó varios santos para evitar que los perros de nuestras casas vivan un 31 de diciembre de terror por culpa de las bombetas.

Lo primero que nos dejó bien claro don José es que ante las explosiones, lo principal que se debe hacer es llenar de confianza y alegría a nuestras mascotas, por eso hay que mezclar la tranquilidad con la diversión.

Lo importante de jugar con nuestros perritos es que, poco a poco, se les va olvidando el escándalo. También esto se puede acompañar con comprarle un juguete nuevo para que le ponga atención a esa novedad. Claro que se necesitan los juguetes viejitos que ya tiene pero el nuevo es el que le hará más gracias.

Es fundamental que las personas no se desesperen ante el estrés de su mascota porque el asunto se complica. Debe haber un ambiente de paz y relajado. El perrito no debe darse cuenta que uno también sufre con ellos, eso les ayuda a no subir sus niveles de estrés.

Por ningún motivo lo deje afuera de la casa y solito en medio de la reventadera de bombetas, eso es de lo peor que se puede hacer. Métalo, póngalo cómodo, acomódelo en una esquinita para que se sienta como lo que es, uno más de la familia.

Para quienes consideran que necesitan una ayudita más allá de la chiroteada, el juguetico nuevo y mantenerlo dentro de la casa, también puede probar con algunos medicamentos que venden en veterinarias para bajarles la ansiedad.

Por ejemplo, el laboratorio Lisan tiene a la venta unas pastillitas totalmente naturales, de té de tilo, que se llaman Quiettuspet, ellos explican que son para: “el control de estados de ansiedad, nerviosismo e hiperactividad causado por: bombetas, música, truenos, grooming, separación de sus dueños, visitas al veterinario y cambio de ambiente”.

Es casi imposible que en su comunidad el último día del año se viva en silencio total, el país está alegre y como en casi todos los países del mundo, el cambio de año se celebra con pólvora, así que prepárese bien para ayudar a su Firulais que en verdad lo va a necesitar y mucho.

¿Qué no debo hacer?

-Si usted se asusta, le transmite ese temor a Firulais así que esté bien tranquilo.

-Evite acariciar al perrito porque él puede creer que cada caricia es un premio a su miedo.

-Por ningún motivo lo castigue por sus nervios.

-No le dé pastillas sin que se las recete su veterinario.

-No lo deje fuera de la casa o completamente solo.

¿Qué sí puedo hacer?

-Meta al perrito en la casa para que se sienta bien acompañadito.

-Alístele un buen rinconcito en donde él se sienta seguro y protegido. Como es un lugar nuevo, para que se acostumbre podría ponerle poquitos de comida en la zona y así él poco a poco llegará. No lo obligue a que acepte el lugar, déjelo que poco a poco lo haga.

-Compórtese como siempre lo hace, que el perrito no se dé cuenta que usted también tiene estrés por las bombetas.

-Póngase a jugar con su mascota y cómprele un juguete nuevo.

-Cuando todavía es de día, póngalo a hacer ejercicios eso le aumenta los niveles de sustancias que le dan bienestar y lo relajan.