Natalia Villegas es una mamá con tantas ganas de vivir que no se resignó a un diagnóstico de cáncer terminal que le dieron los médicos de Costa Rica y se fue a España persiguiendo la esperanza de vencer la enfermedad.

En La Teja dimos a conocer su historia el 27 de julio porque ella necesitaba ayuda para recaudar los ¢30 millones que costaba el procedimiento médico, ya que tenía programada la operación para el 20 de agosto.

La luchadora consiguió la plata y llegó a Córdoba, España, donde le hicieron la cirugía el día programado.

Ella contó a La Teja que la operación fue muy delicada y que tardó 14 horas, pero valió la pena porque pudieron sacarle todo lo malo. Luego pasó tres días en cuidados intensivos.

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“Me eliminaron por completo estómago, bazo, vesícula, ovarios, trompas de falopio, matriz, cauterizaron lesiones en intestino y en colon, limpiaron todo el peritoneo, pusieron quimioterapia HIPEC durante la cirugía, conectaron esófago con intestino delgado e intestino delgado con grueso... ¡Soy una obra de arte por dentro!”, aseguró emocionada la sobreviviente.

“Tengo más de 150 grapas cerrando la herida de mi abdomen. Me dijeron que la recuperación de esta cirugía es muy dolorosa y lenta y doy fe de que realmente es muy doloroso, pero hoy me encuentro bailando, viviendo, disfrutando. Mi doctor pasa haciéndome exámenes porque tengo una recuperación perfecta y rápida”, agregó.

Si todo sale bien, Natalia regresará al país a mediados de octubre para continuar con su vida al lado de su familia.

Nunca perdió la fe

La valiente mujer se enteró de que tenía cáncer gástrico hace ocho meses y casi que de inmediato los médicos la desahuciaron y le dijeron que le quedaban entre 18 y 24 meses de vida, pero ella no aceptó eso y empezó a buscar tratamientos en otros países.

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“Los médicos, cuando me diagnosticaron en Costa Rica, me daban meses de vida, pero aquí estoy de pie y con esta operación Dios ha fortalecido mi cuerpo de una manera tan sobrenatural y tan hermosa que hoy estoy aquí solo por la gracia de Dios”.

“Aquí hay una persona que ha sabido cómo mantener la fe y la valentía ante los circunstancias que la vida nos da. Espero y declaro sanidad total sobre mi vida, pero mientras en Dios confío y declararé con todo mi ser que ya no soy esclava del temor, del diagnóstico”, manifestó.

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La paciente es mamá de tres hijos y asegura que ellos son el motor de su vida y su motivo para luchar cada día para recuperarse lo antes posible y regresar con ellos.

Ella viajó sola a España, pues por un tema de presupuesto se le dificultaba llevar a alguien más, por dicha en el hospital en el que está internada la están cuidando y chineando bastante.

Natalia habla todos los días por teléfono con sus familiares y ellos la alientan y se alegran cada vez que ella les cuenta alguna mejoría que haya tenido.

“Tengo más de 150 grapas cerrando la herida de mi abdomen”.

—  Frase de Natalia Villegas