¿Por qué nunca hay que poner el celular en la mesa durante una reunión?

En promedio, las personas usamos cinco horas diarias el celular, por eso esta herramienta se ha convertido muchas veces en un distractor que interfiere en todos los ámbitos de nuestra vida y uno de ellos es el trabajo y las reuniones sociales.

Para evitar que este mal hábito que hemos adquirido se pasee en sus negocios o amistades, conversamos con los especialistas en protocolo Juan Carlos Bonilla y Christy Marín para que nos explicaran qué podemos hacer para evitarlo.

“Según las reglas de etiqueta y protocolo, en las reuniones de negocios jamás se puede poner el celular en la mesa, menos si se trata de un almuerzo o cena, porque este aparato es muy cochino y además le debo respeto y debo ponerle atención a quien está conmigo, eso es parte de la imagen que estoy dando como cliente”, explicó Marín.

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En el caso de las mujeres, el consejo es dejarlo en el bolso y en el de los hombres en el bolsillo del pantalón o del saco, preferiblemente en modo vibración, aclara Juan Carlos.

Si usted definitivamente tiene que andarlo porque espera una llamada importante, explíquele de antemano a la persona que usted está pendiente por esa situación, para que lo comprenda. O en caso de que la llamada sea parte de lo que se discute en dicha reunión.

Si debe darle un dato importante a esa persona y está en el celular, sáquelo, lo busca, se lo da y vuelva a guardarlo para que no se distraiga.

Si la que entra es una llamada personal importante, discúlpese, salga de la sala en la que se encuentra para atenderla y regrese al terminar.

Con los amigos, se supone que el objetivo de la reunión es compartir tiempo juntos, para eso están reunidos, entonces conversen entre ustedes y olvídense del teléfono.

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“Pueden darse un recreo de celular de cinco minutos para revisar notificaciones o para tomarse una foto y compartirla entre los presentes, pero luego de ese tiempo a guardarlo nuevamente”, agregó Christy.

Si estamos en el cine o la iglesia, nunca debemos contestar ninguna llamada y para evitar que interrumpa, lo apagamos o ponemos en modo vibración.