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“Tengo cinco años de pagar el seguro del carro y el día que lo necesité no sirvió de nada”

A nadie le deseo una mañana como la que pasé este martes

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De verdad que hay días de días, hoy para mí fue uno bastante complicado, sobre todo frustrante, me quedé varada y el seguro que pago puntualmente desde hace cinco años al final no sirvió de nada.

Salí de Desamparados pasadas las 7 a. m. y me dirigí hacia mi trabajo en Tibás. En la rotonda del parque de la Y Griega agarré hacia Zapote y como a los 300 metros algo sonó, una pequeña explosión en el carro y empezó a salir vapor, así que de una vez me orillé, puse las luces de emergencia, apagué el motor, me puse el chaleco reflectante, por aquello de un tráfico, me bajé, puse el triángulo y luego llamé al superhéroe que siempre me ayuda en momentos difíciles: mi papá.

Le conté lo que había pasado y me dijo que iba a agarrar un taxi para llegar dónde yo estaba, ni desayunar pudo porque se iba a sentar a la mesa cuando lo llamé. Le dije que llevara una botella con agua porque el carro había botado todo el anticongelante.

Cuando llamé a pedir la grúa todo estaba bien, pero una hora después me avisaron que no había. Foto: Rocío Sandí Z. (Rocío Sandí)

Como a las 8 de la mañana, mientras esperaba a mi papá, se me prendió el bombillo y llamé al INS para pedir una grúa, porque sé que el seguro incluye ese servicio.

Me contestaron rápido y me pidieron todos mis datos personales y los del carro, luego de verificar que el seguro estuviera al día me dijeron que iban a buscar una grúa y me iban a mandar un mensaje por WhatsApp para que mandara la ubicación y así lo hice.

Mi papá llegó como a las 8:20 a. m. y yo estaba preocupada porque a las 9 a. m. tenía pactada una entrevista con el diputado Fabricio Alvarado en la Asamblea Legislativa y poco después otra con el legislador Gilbert Jiménez.

Me puse de acuerdo con mi papá para que él se quedara esperando la grúa y llevara el carro de una vez al taller, en La Uruca, y yo me fui en taxi para la Asamblea para poder llegar a la entrevista, ya no me daba tiempo de llegar a la redacción, así que me fui directo.

Impotencia y frustración

A las 8:55 a. m. me llegó un mensaje del INS en el que me decían que no habían encontrado una grúa cerca y que no iban a poder darme el servicio. ¡Casi me da algo! Mi papá estaba en la calle con mi carro esperando una grúa que no iba a llegar y yo tenía que entrar a la entrevista, no sabía qué hacer.

A como pude busqué lo más rápido posible en Facebook un servicio de grúa y le di la dirección de dónde estaba el carro, me dijo que me cobraría ¢40 mil. Luego le mandé un mensaje a mi papá con el número del señor para que se terminaran de poner de acuerdo.

Cuando consulté al INS dijeron que no tenían casos reportados de clientes sin grúa. Foto: Rafael Pacheco. (Rafael Pacheco Granados)

Entré a la entrevista con la mejor cara posible y apenas salí llamé a mi papá para ver cómo iba todo, ya iba en la grúa para el taller.

Ya un poco más tranquila revisé bien el mensaje del INS en el que me informaban que no podían darme el servicio de grúa y decía que por el inconveniente me podían dar un reembolso de hasta $200 (unos ¢108 mil), claro, hay que presentar la factura del servicio de la grúa.

Me sentí realmente frustrada, siento que no es justo, uno paga un seguro por si tiene algún imprevisto y hoy lo tuve y no sirvió, tuve que correr para resolver el problema igual que si no hubiera tenido ningún seguro.

A las 10 a. m. fui a la entrevista que tenía con el diputado Gilbert Jiménez, por dicha me dio tiempo de asistir a los dos compromisos. Al salir seguía con el sinsabor de lo que había pasado.

Luego de asegurarme que mi papá llegó bien al taller y dejó el carro para que revisaran lo que parece ser un problema en el calefactor, contacté a la gente de prensa del INS para consultar si es muy común que los usuarios no reciban el servicio de grúa por el que pagan y por qué se dan estos casos, y me dijeron que no tenían reportado ninguna situación de este tipo, entonces les di mi nombre completo y número de cédula para que volvieran a consultar, pero a las 5 p. m. aún el departamento de prensa no había recibido la información.

Espero tramitar el reembolso de la grúa pronto para recuperar ese dinero y de verdad espero que la próxima vez que tenga una emergencia el seguro responda cómo debe de ser porque no se vale que a veces sirva y a veces no, cuando sí cobran puntual, en eso no fallan.

Rocío Sandí

Rocío Sandí

Licenciada en Comunicación de Mercadeo de la Universidad Americana; Periodista de la Universidad Internacional de las Américas, con experiencia en Sucesos, Judiciales y Nacionales. Antes trabajó en La Nación y ADN Radio.

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