El empresario Leonel Baruch fue muy fuerte en sus declaraciones en la Asamblea Legislativa contra la diputada Pilar Cisneros, le dijo mentirosa y hasta dijo que si le interesaba el bien del país debía dejar su cargo porque le está haciendo daño a la democracia, la periodista no se quedó callada y le respondió con todo.

Por segundo lunes consecutivo el empresario asistió a comparecer a la Comisión Especial de Financiamiento de Partidos Políticos y se le plantó con los tacos de frente a la legisladora oficialista.

Baruch dijo que la diputada usó su tiempo en la comisión para hacer preguntas con aseveraciones falsas. También aseguró que es preocupante que la pauta de publicidad del gobierno la acaparen actualmente el Sinart y los medios de comunicación “foca” que aplaudan las acciones del presidente Rodrigo Chaves.

“Con respecto a los mensajes de WhatsApp (presentados por Pilar Cisneros sobre lo que hablaron en la reunión de agosto pasado) tengo que decir que lo que ella hizo en la Asamblea fue mentir varias veces, es falso y totalmente falso que ella haya escogido el lugar de la reunión... fui yo o ella quien en última instancia escogió la Asamblea Legislativa. La transparencia de la que se jacta doña Pilar es un cuento como la mayoría de sus argumentos”, expresó Baruch.

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El empresario dijo que Pilar mostró en el Plenario sólo algunos de los mensajes que intercambiaron entre ellos y que los sacó de contexto, por lo que ofreció una copia notarizada del historial de WhatsApp completo entre ellos dos.

“Realmente no sé cómo no tiene vergüenza la señora Cisneros, si la tuviera hace rato debió haberse retirado de esta Asamblea y dejar de hacerle daño a este país”.

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¿Verdad a medias?

Sobre la polémica reunión que tuvieron Baruch y Cisneros el 29 de agosto del año pasado, él dijo que la legisladora le mandó un mensaje por medio de un hombre llamado Tito Burgués, sobre la intención que tenía de reunirse con él.

El empresario leyó los mensajes que intercambió con Cisneros y en los que queda claro que la legisladora dijo que luego de reunirse con ella podían valorar una reunión con el presidente Rodrigo Chaves.

Baruch aseveró que estuvo fuera de Costa Rica unos días y que cuando regresó le avisó a Cisneros que ya estaba en el país y que ella le dijo que podían reunirse un viernes después de las 4 p. m., el sábado o el domingo, por lo que él dedujo que la reunión no sería en el Congreso.

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El empresario le dijo a la diputada que ese fin de semana no podía reunirse con ella porque tenía compromisos familiares, pero que el martes y jueves de la semana siguiente tenía disponibilidad.

“Tengo programa de radio hasta las 8:15 a. m., podríamos desayunar en el Hotel Costa Rica si le parece”, dice el mensaje que le escribió Cisneros a Baruch y que este leyó en la comparecencia.

“Supongo que eso no es la Asamblea Legislativa, ‘o podríamos reunirnos en la Asamblea a partir de las 9 a. m., me avisa’, de todas las opciones, esa fue la última”, dijo el empresario.

El banquero dijo que en un principio aceptó verse con Pilar en el hotel capitalino, pero que luego de meditarlo, y por motivos de transparencia, el 28 de agosto del 2022, (un día antes de la reunión) le pidió que mejor cambiaran el lugar de la reunión para la Asamblea Legislativa y ella aceptó.

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Baruch reiteró que el objetivo de la reunión fue para pedirle que, con la ayuda del medio de comunicación CRHoy, (del que es dueño), ayudara al gobierno a desaparecer el periódico La Nación.

El empresario dijo también que se cansó de ver que Cisneros le mandaba mensajes pidiéndole que cambiara titulares de notas de CRHoy, por lo que dejó de contestarle y ella dejó de mandarle sus “matonadas”, término usado por el empresario.

Pilar se sacude

Ante las acusaciones del empresario, la diputada oficialista asegura que todo es mentira e insiste en el tema del detector de mentiras para aclarar el tema de una vez por todas.

“Esto se acaba se acaba con algo tan sencillo como esto: Pilar Cisneros y Leonel Baruch, cada uno con un detector de mentiras a ver quién dice la verdad y quien miente, así de fácil.

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“Este señor es un completo mentiroso, La Nación nunca fue objeto de conversación en esa conversación, nunca y los sostengo y lo resostengo, él no tiene ninguna prueba ni de su incomodidad ni de las mentiras de Pilar Cisneros ¿dónde están?”, manifestó la diputada pese a que el lunes pasado, después de la comparecencia de Baruch, reconoció ante los medios de comunicación que sí había hablado de La Nación y otros medios, eso sí, sostuvo que nunca fue su intención pedir ataques contra el medio de comunicación.

Al consultarle al empresario una vez más si está dispuesto a someterse al detector de mentiras, él dijo que sí, pero que como condición pone que participen también el presidente, Rodrigo Chaves, y el ministro de Hacienda, Nogui Acosta, porque aseguró que ellos lo atacaron y lo acusaron de evasor fiscal por una causa que nunca tuvo futuro y siente que hacen falta explicaciones al respecto.

Ante eso, Cisnero dijo que el asunto del detector de mentiras es entre Baruch y ella, y que el presidente y el ministro de Hacienda no tienen vela en el entierro.