El cuerpo de Luany Valeria Salazar Zamora, de 23 años, lo encontraron enterrado en el patio de una casa en Linda Vista de Río Azul, en La Unión de Cartago.

El hallazgo lo hicieron un hermano de la muchacha, José Ramírez, y una tía de ella, este lunes 15 de junio, pasadas las 7 de la noche.

El hermano de la víctima, le dijo al canal 8 de Multimedios que se cansaron de esperar que la Policía Judicial llegara a revisar la casa de un vecino que veía a Luany con ojos de “morbo”, por lo que este lunes él y otros allegados pidieron permiso para entrar a la vivienda.

“Yo entré y llegué al patio trasero y vi una tierra removida y me puse a escarbar y la encontré, ahí estaba mi hermana, estaba enterrada”, dijo el joven, quien aún tenía las uñas llenas de tierra.

Ramírez dice que todos en el barrio sospechaban del sujeto que vivía que en esa casa, sobre todo porque días después de que la muchacha se perdió se fue del barrio.

“Llamamos al OIJ, lo identificamos en fotos, pedimos que vinieran a buscarlo a la casa, pero la Policía nunca se acercó, ningún agente nos entrevistó. Hoy (lunes) volvimos a llamar al OIJ y nos dijeron que aún no tenían el caso asignado y nosotros nos sentimos desesperados con esa respuesta, ¿cómo es posible?”, agregó el hermano a Multimedios.

A pesar del dolor por la perdida, la familia quiere respuestas.

“La Policía Judicial tiene que cambiar estos protocolos, cómo es que tantos días después de que pusiéramos la denuncia por la desaparición de mi hermana ni siquiera hayan venido a buscar en la casa en la que todos sospechamos que podía haber pasado algo, ¿cómo es posible que revisáramos primero nosotros la casa que ellos?”.

Además, este hombre del que sospechaban lo identificaron en las oficinas del OIJ de La Unión de Cartago por medio de fotos y fueron los mismos agentes judiciales quienes le dijeron a la familia que ese tipo tenía un amplio historial delictivo, situación que a la familia le preocupó y esperaban con mucha más razón que el OIJ actuara.

Ahora temen no encontrar al sospechoso.

El departamento de prensa del OIJ informó este lunes a las 9:30 de la noche, que aún no pueden afirmar que el cuerpo hallado en la vivienda sea de el Luany; sin embargo, los familiares que la encontraron dicen que la ropa que tiene el cadáver es la que andaba la joven el día que desapareció.

La Policía Judicial informó que será hasta el martes en la mañana que irán a recoger evidencias y levantar el cuerpo, ya que la oscuridad dificulta esas labores.

Una semana de desesperación

La Teja habló con los papás de la joven, Rándall Salazar y Ana Patricia Zamora, horas antes de recibir la trágica noticia.

El papá de Luany vive en Estados Unidos desde hace 16 años; sin embargo, mantenía una relación muy cercana con la joven, todos los días conversaban por videollamadas y en las noches hasta se ponían a ver las mismas películas o series de Netflix para comentarlas.

“Llevo muchos días sin dormir, sin comer, esto ha sido muy duro, no entendemos cómo desapareció y si era que tenía algún problema cómo no nos lo dijo”, aseguró.

Este 2020 era un año especial para padre e hija porque en mayo se iban a reunir, él vendría a Costa Rica y visitarían playa Tamarindo, Conchal y también Manuel Antonio; lamentablemente la pandemia por COVID-19 arruinó los planes.

“Mi hija sabe muy bien inglés, tengo muchos años de estar en Estados Unidos, aquí me casé, mi esposa es ciudadana americana y el próximo año me darían la ciudadanía a mí, pero yo siempre le dije a mi hija que mi felicidad estaría completa hasta que ella se viniera a vivir con nosotros”.

“Íbamos a empezar a hacer las vueltas para que ella fuera a la Embajada Americana, pero antes de esto, yo viajaría a Costa Rica en mis vacaciones y pasaría con ella”, expresó don Rándall.

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Doña Ana Patricia aseguró que la última persona que vio a Luany misteriosamente desapareció de la comunidad, hecho que les parece muy extraño, ahora este hombre es buscado por las autoridades como principal sospechoso.

“El mismo día que desapareció mi hija él se fue, muchos le preguntamos por el paradero de ella y siempre se contradijo, él OIJ tampoco vino a entrevistarlo”, comentó doña Ana.

Luany desapareció el martes 9 de junio en la noche, luego de que una amiga la buscara para fumarse un cigarro con ella, esta muchacha (la amistad) le dijo luego a la mamá de Luany que estuvieron hasta tarde en la casa de un amigo, que vive cerca y que allí llegó un muchacho del barrio y le dijo a Luany: “Vamos, que le tengo un negocio” y la sacó de la casa.

Desde ese momento no la vieron más, este hombre le dijo a la familia que él la dejó en la alameda para que se fuera a la casa, el miércoles a las 3 de la madrugada, pero ella no llegó.

Luego la mamá recibió un mensaje el miércoles a las 6:40 am de Luany, en el que le decía que ya casi llegaba, pero no fue así; desde ese momento la familia se desesperó porque Luany siempre avisaba dónde y con quién estaba.

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