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Fabrizio Ronchetti explica por qué Vladimir Quesada y Mariano Torres siempre serán vitales

El exdelantero del Saprissa estuvo en el pódcast de La Teja y elogió al club por su rendimiento en la temporada

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Fabrizio Ronchetti fue el invitado del más reciente capítulo del pódcast de La Teja “La Cueva de los morados”, donde habló de todo sobre su trayectoria con el Deportivo Saprissa, el cariño que le guarda la afición por su entrega y hasta de su nueva faceta como técnico de ligas menores en el Municipal Liberia.

Por más de una hora, el uruguayo conversó con los periodistas Ricardo Silesky, Johan Rojas y Yenci Aguilar, donde analizó la actualidad de los morados en el primer juego de la ida en semifinales del torneo de Apertura ante el Club Sport Cartaginés y resaltó dos piezas vitales del equipo: el técnico Vladimir Quesada y el volante Mariano Torres.

Con Vladi coincidió cuando él defendió la morada en el 2016, en ese momento Quesada era asistente de Carlos Watson, así que explicó por qué tuvo una buena conexión con Vladi y hasta aprendió bolados para aplicarlos en el futuro.

“A Vladimir le tengo un aprecio importante porque es una persona que se deja querer mucho, muy humilde, los uruguayos somos personas de perfil bajo, no nos gusta mucho la exposición y con Vladimir tengo mucha conexión porque es igual, él cuando llega a las conferencias de prensa nunca es protagonista, es discreto y la gente no le da el valor que se merece por ser como es.

“Hay que resaltar más su valor, porque con esa posición que toma con la prensa, resalta al grupo de jugadores y él pasa a segundo plano, porque no le interesa ser el protagonista, eso es fundamental resaltarlo porque estamos con muchos entrenadores que siempre se quieren llevar los aplausos, buscan proyectarse sobre el equipo y a Vladimir lo respeto mucho por eso, él no vende humo y no anda en polémicas”, explicó.

También dio unas palabras de elogio para Mariano Torres, con quien compartió camerino y siempre estará agradecido por su apoyo en los momentos más rudos.

“Lo conocí cuando llegó al Saprissa, yo venía del Cartaginés y él (Mariano) de Bolivia, hicimos una gran amistad de un momento a otro, nos concentrábamos juntos y su comportamiento no lo voy a olvidar, se portó demasiado bien conmigo y con mi familia.

“Generalmente, no soy de hacer muchas amistades porque selecciono muy bien a las personas, pese que con todo mundo tengo buena relación, con Mariano aparte de una gran sociedad que teníamos dentro de la cancha, fuera de ella fue extraordinario, lo respeto y admiro, siempre le voy a desear lo mejor”, agregó.

Por decisiones familiares, desde hace varios años Ronchetti vive en Guanacaste, un cambio que lo disfruta a lo grande, que le permite vivir otro estilo de vida y porque el fútbol le dio una revancha, pero ahora desde el banquillo.

“Llegamos acá porque a mi señora la trasladaron del trabajo que tiene y una de las opciones que teníamos era venirnos a Santa Cruz, como a nosotros no nos gusta tanto la ciudad ni las presas, decidimos alejarnos de ese ritmo que nos tenía muy cansados y la verdad tomamos una buena decisión, porque acá es otro estilo, la gente tiene otra paz, no hay presas ni esa sensación de correr de un lado para el otro, todo ese tipo de cosas que antes no nos complementaban bien, la conseguimos acá.

“Después apareció la pandemia, el fútbol se paró, los salarios se acortaron y decidí no jugar más (jugaba con Aserrí en segunda), ahí me fui complementando en otros roles, saqué varios cursos de gerencia deportiva y la licencia pro de entrenador en Conmebol, en medio de eso surgió la posibilidad de que las ligas menores regresaron a competir y el Municipal Liberia me contactó.

“No era lo que buscaba, el rol de entrenador es muy difícil, es una profesión ruda porque dependes de resultados, más allá de que si juegas bien o que los jugadores crezcan, pero si los resultados no llegan, te echan, pero surgió, tenía mucho tiempo libre, empecé y me encariñé porque trabajé con chicos de la sub-15 y sub-17, están en plena adolescencia y me rejuvenecieron, pese a que me sacaron varias canas, pero me hicieron reír, los entendí y me recordaba cuando pasé por esa etapa.

“Nos fue muy bien ahí, me pasaron al alto rendimiento que es donde estoy actualmente y ayudo a Minor Díaz en la primera división como asistente”, comentó.

Como cierre de su participación, Ronchetti les agradeció a los aficionados del Saprissa por el cariño que le tienen y les dio un par de consejos que caerán muy bien para las etapas finales que se avecinan.

“Con esto de las transmisiones televisivas, se ha perdido el folclor de ir a la cancha, el disfrutar ir con la familia, pero vayan al estadio, sé que es difícil por un tema económico, pero siempre que puedan vayan a los partidos, no dejen morir esta pasión porque eso da vida.

“Cuando no estén conformes con un entrenador o el equipo, se lo digo como exjugador, no hay responsabilidad más grande que cuando las cosas no salen y que a pesar de eso, la gente te apoye igual, porque sale el compromiso tremendo de dar el extra y eso se refleja después”, finalizó.

Fabrizio Ronchetti actualmente es asistente de Minor Díaz y técnico del alto rendimiento del Municipal Liberia.
Johan Rojas Ortega

Johan Rojas Ortega

Periodista egresado de la Universidad Latina de Costa Rica desde 2014. Con experiencia en coberturas y temas en deportes, judiciales, nacionales y sucesos para prensa escrita, radio y web.

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