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Trillizos nacieron con malformación que se da en uno de 160 trillones de casos

Los bebés hicieron historia al ser operados para corregir esta condición

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Unos trillizos de Nueva York hicieron historia médica al ser los primeros en nacer con una rara malformación craneal, y ser también los primeros en ser operados para corregir esta condición.

Los bebés de seis meses, Hunter, Jackson y Kaden, fueron operados exitosamente en el Hospital de la Universidad Stony Brook en Long Island a los dos meses de nacidos. 

Este lunes, doctores y los padres primerizos, Michael y Amy Howard, hablaron sobre las operaciones en  conferencia de prensa. 

Los doctores explicaron que los bebés nacieron con craniosynostosis, es decir, una fusión en la placa craneal que deforma el cráneo, puede afectar el desarrollo del cerebro en el futuro y también la visión.

La probabilidad de que los trillizos nacieran con la misma malformación es de aproximadamente uno en 160 trillones.

Con esas probabilidades, era lógico que Michael y Amy se sorprendieran no solo porque iban a tener  trillizos sino también porque tendrían que pasar las primeras semanas de la vida de sus hijos en la unidad de cuidados intensivos, ademas, aprender acerca de esa rara condición de cráneo.

Fueron nueve semanas después del triple nacimiento que sus pequeños fueron sometiros a la  cirugía correctiva en la cabeza.

"Jackson, Hunter y Kaden tuvieron una cirugía endoscópica, que suele tardar entre 90 y 180 minutos, y tiene una estancia hospitalaria promedio de una noche", dijo el doctor David Chesler, neurocirujano pediátrico de los niños.

 "Este procedimiento tiene resultados comparables a la tradicional cirugía de cráneo abierto, pero la cirugía abierta puede tomar de dos a seis horas y requieren alrededor de cinco días en el hospital. Además, rara vez hay necesidad de transfusiones de sangre con cirugía endoscópica, a diferencia de cráneo abierto, por lo que el riesgo de pérdida de sangre y las complicaciones se reducen drásticamente", explicó Chesler.

Como parte de su recuperación, los pequeños recibieron cascos a la medida que tendrán que usar 23 horas al día. Los cascos están diseñados para ayudar a guiar y moldear la forma de sus cráneos a medida que crecen. 

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