Dos oficiales de la Fuerza Pública fueron detenidos, la mañana de este martes, como sospechosos de facilitarle el trabajo a una mujer que lideraba una organización narco.
Se calcula que esta banda tenía ganancias de ¢35 millones al día.
Se trata de dos uniformados destacados en San José, uno de apellido Hernández, de 27 años y que ingresó a la Policía el 20 de marzo del 2014 y el otro apellidado Chacón, de 33 años y quien porta el uniforme desde el 18 de junio del 2007.
Ambos oficiales fueron detenidos en un operativo dirigido por agentes de la Policía de Control de Drogas (PCD), quienes venían siguiéndoles los pasos desde hace varios meses como parte de una investigación que permitió desmantelar una poderosa banda narco de Desamparados.
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Según la investigación hecha por la PCD, Hernández y Chacón no formaban parte de la banda; sin embargo, ambos dejaban que el grupo operara libremente, es decir no hacían nada, especialmente se hacían a los locos con la líder de la organización, una mujer de apellido Núñez Sequeira y de 43 años, conocida como La Señora.
En apariencia los uniformados también suministraban información policial a la organización para alertarlos sobre operativos y que estos se pellizcaran para que no fueran detenidos con las manos en la masa.
Esta banda fue desmantelada el pasado 16 de mayo por medio de 14 allanamientos realizados en La Unión de Cartago, Los Guido de Desamparados, Curridabat y Limón centro. La banda dominaba el mercado de la droga en Desampa y en La Capri.
Ese día Michael Soto, ministro de Seguridad Pública señaló que la organización tenía 44 puntos de venta de drogas, con los cuales lograba hacer entre ¢1 millón y ¢1,5 millones, es decir, al día se podían echar a la bolsa entre ¢30 millones y ¢35 millones.
Las autoridades indicaron que La Señora era la líder externa de la organización, pero que el verdadero mandamás es un hombre de apellido Mora Núñez y mejor conocido como el Gordo Leo, quien está en Máxima Seguridad de La Reforma desde agosto del 2008 por narcotráfico.