Sin miedo a los enfermazos

El jefe de Planes y Operaciones del OIJ, Michael Soto, asegura que en las últimos días se han visto más detenciones de personas sospechosas de abusos y pornografía porque la gente tiene menos miedo de denunciar.

Lo más preocupante para el OIJ es que muchas víctimas están siendo atacadas por las redes sociales, sobre todo por Facebook y WhatsApp. Los más expuestos son los menores.

La primera detención que hicieron las autoridades la mañana de este viernes fue la de un hombre de apellido Quirós, sospechoso de abusar sexualmente de una sobrinita de ocho años.

Al parecer, el sujeto también producía pornografía infantil con la pequeña.

La captura se dio en un allanamiento en un bar propiedad de Quirós y la casa en la que vivía, en San Antonio de Desamparados, San José.

Soto comentó que la niña no vivía con el tío, pero a veces, por la relación familiar, la dejaban durmiendo en la casa de él.

El hombre abusaba de la pequeña y grababa el delito; sin embargo, las autoridades indicaron que no difundía los videos.

En apariencia, el hombre amenazaba a la pequeña con hacerle daño si le contaba a alguien. La madre de la niña se dio cuenta de lo que ocurría y denunció ante las autoridades.

Los abusos se dieron durante todo el 2016 y hasta mayo de este año. Los agentes decomisaron en la casa y en el bar varios dispositivos electrónicos.

Quirós no tiene antecedentes por otros delitos.

Chiquita le contó a la mamá

Por otra parte, a un hombre de apellido Fernández, de 32 años, lo frenaron la mañana de este viernes en Río Grande de Atenas, Alajuela, como sospechoso de difusión de pornografía y corrupción contra menores.

Al sospechoso lo denunciaron ante el OIJ de Limón después de que una menor le contara a sus padres lo que le estaba pasando, sin embargo, las autoridades sospechan que estaba embarrado en varios casos.

Soto comentó que el hombre contactaba a menorcitas de entre 12 y 13 años para bajar sus fotos del perfil y subirlas a otra página.

"El hombre las amenazaba que para quitarlas tenían que mandarle fotos desnudas y en distintas posiciones" , comentó Soto.

El enfermazo también les mandaba  pornografía infantil en que se veían menores de 8 a 14 años (extranjeros).

En la vivienda de Fernández decomisaron su computadora y otros dispositivos como evidencia.

El sospechoso tiene antecedente por amenazas.

Soto hizo un llamado para que los padres controlen el uso de las redes sociales de sus hijos y además supervisen todo lo que sus hijos suben y comparten para que no se conviertan en posibles víctimas.

El jefe policial aseguró que la valentía de la gente para denunciar es muy positiva para el OIJ, pues les permite evitar que los casos vayan en aumento.

Entrevista con Eva León, sicóloga

–¿Cuál es el problema de que los menores usen las redes sociales?

La población más vulnerable en el acceso al Internet son los niños. Los más jóvenes tienden a ser los más “audaces” en el manejo de las redes sociales. Esa facilidad y encanto se vuelve permisivo, al punto de violar las normas de un mínimo de edad para manejarlas por sí solos. Los padres, debemos entender que la madurez emocional de un niño o niña de ocho años, un poco menos o un tanto más, no está preparada para afrontar toda aquella “información” de la que nos bombardean los medios.

–¿Cómo se controla el uso de las redes?

Sí su hijo o hija ha alcanzado la madurez de su adolescencia para usar las redes sociales es necesario un control de lo que ven, lo que hablan y con quién hablan, lo que hace y dicen. Y esto no es violación de la privacidad de los hijos, esto es prevención, esto es cuidar su integridad, porque en las redes sociales se da el bullying.

–¿Cuáles serían indicadores de que nuestros hijos están siendo acechados en las redes sociales?

Si notan cambios en la alimentación, en el sueño, en sus emociones, en su carácter, conversen con sus hijos, deles siempre la confianza de acercarse a ustedes si alguien les insinúa, incita o simplemente hace algo, que les haga sentirse incómodos.