El hombre de apellidos Angulo Araya que asesinó este lunes a su expareja y a la hija de ella en León Cortés, San José, estuvo persiguiéndola durante un mes, pese a que contaba con medidas cautelares para mantenerse alejado de ella.

El fatal hecho ocurrió a eso del mediodía en Carrizal de San Pablo de León Cortés, ahí perdieron la vida Gerardita Marlin Agüero Fallas de 53 años y su hija de tan solo 13 años. El sospechoso del crimen tiene 65 años y se entregó solito, en la delegación de Terrazú el mismo lunes, minutos después del crimen.

Gerardo Solís, hijo de doña Gerardita dijo que su mamá mantuvo una relación con Angulo por aproximadamente dos años, pero debido a los constantes pleitos ella decidió separarse de él.

“Ella vivía con ese señor pero se separaron y hace como un mes él llegó a un bar y la llamó para que saliera, y ya afuera le dio un golpe en la cara y en el suelo la siguió golpeado, tuvieron que agarrarlo entre cuatro para quitárselo de encima”, contó.

Luego de este ataque Agüero le puso medidas de alejamiento al agresor, pero lastimosamente eso de nada sirvió.

“Él andaba ceñido y la andaba siguiendo por todo lado, porque yo fui testigo de que cuando ellos estaban enojados o peleados el andaba persiguiéndola por todo lado”, añadió.

Nadie ayudó

Además del dolor de perder a su mamá y a su hermanastra a manos de un desalmado, Solís dijo que también tiene mucha indignación con la Policía, pues asegura que él les advirtió que Angulo no dejaba en paz a su mamá.

Esta situación la vivió hace como 15 días cuando estaba en un bar restaurante con ella y el sospechoso ingresó ahí como si no tuviera ningún tipo de restricción.

“Yo salí y paré una patrulla que iba pasando, le dije a los oficiales que ese señor estaba ahí y hasta les enseñé la denuncia y aún así no hicieron nada, solo me regañaron y pelearon conmigo. Eso fue una muerte anunciada, porque yo les dije que él andaba armado pero hasta que sucedió la tragedia es que se pusieron a ver qué hacían”, recordó.

Solís dijo que él pasaba cuidando a su mamá siempre que podía, pero como trabaja en San José se le hacía imposible acompañarla en todo momento.

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Desalmado ataque

El OIJ dio a conocer que Gerardita murió en el lugar luego de recibir 11 balazos, mientras que su hija recibió un disparo en la cabeza, por el cual perdió la vida horas después en el hospital Calderón Guardia.

De acuerdo con la Fiscalía, Angulo también habría buscado a otro hombre para matarlo, ya que en apariencia este era la nueva pareja de doña Gerardita, pero como no lo encontró decidió quemar los dos carros que estaban en un galerón.

El Ministerio Público indicó que están a la espera de que se realice una audiencia para pedir medidas cautelares en contra de Angulo.

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