Escazuceño jamás imaginó que le tocaría cargar al santo por el cual le pusieron su nombre justo el día en que la Catedral josefina se convirtió en el Santuario del papá de Jesús
Escazuceño jamás imaginó que le tocaría cargar al santo por el cual le pusieron su nombre justo el día en que la Catedral josefina se convirtió en el Santuario del papá de Jesús