Se paró sola, a unos 30 metros de una fila de agentes que la miraban del otro lado de la calle. Tras dar unos pasos, se acostó levantando los pies y haciendo poses de ballet. Luego se sentó con las piernas y los brazos extendidos.
Se paró sola, a unos 30 metros de una fila de agentes que la miraban del otro lado de la calle. Tras dar unos pasos, se acostó levantando los pies y haciendo poses de ballet. Luego se sentó con las piernas y los brazos extendidos.