La campaña de protesta se llama “Action culottée” -un juego de palabras que puede traducirse como “acción descarada”- y fue coordinada por los propietarios de las tiendas en Facebook.
La campaña de protesta se llama “Action culottée” -un juego de palabras que puede traducirse como “acción descarada”- y fue coordinada por los propietarios de las tiendas en Facebook.