El fallecimiento de Oliver Gorman, un niño británico de 12 años que inhaló desodorante en su habitación, reavivó la alerta internacional sobre el peligroso reto viral conocido como “chroming”
El fallecimiento de Oliver Gorman, un niño británico de 12 años que inhaló desodorante en su habitación, reavivó la alerta internacional sobre el peligroso reto viral conocido como “chroming”