La intérprete británica murió en Londres tras una larga lucha contra el alzhéimer. Fue reconocida por su papel en Shirley Valentine, que le valió una nominación al Óscar
La intérprete británica murió en Londres tras una larga lucha contra el alzhéimer. Fue reconocida por su papel en Shirley Valentine, que le valió una nominación al Óscar