Cáncer ataca a más peluditos

La familia Oconitrillo González recuerda con amor a su mascota Kalúa que ya murió, aunque para ese hogar es como si la peludita aún estuviera con ellos.

Esa sensación creció cuando vieron la foto de la portada de La Teja que ilustraba el reportaje "Descanso verde para peluditos", del pasado 17 de setiembre, y que destacaba la tumbita donde reposan los restos de la pequeña chihuahau.

Kalúa era una perrita de 14 años que murió de cáncer el 8 de mayo pasado. Antes de ella la familia había tenido solo perros de razas grandes, pero Kalúa se ganó el corazón de Damián Oconitrillo y demás parientes. Fue el primer perro que durmió adentro de la casa.

En vida, Kalúa viajó a Limón, Guanacaste y Puntarenas, le encantaba el mar, pero sobre todo la playa. Luego de morir de cáncer, sus restos descansan en el cementerio de perros Tierra Enamorada, en el Bajo los Rodríguez, en San Ramón de Alajuela.

Damián Oconitrillo, miembro de esa familia, escribió a La Teja contando la historia de Kalúa, quien dejó tres hijas. Aunque los dueños siempre la tuvieron en control veterinario, la perrita no pudo ganar la batalla.

“Le apareció un abultamiento en las mamas y la llevamos al veterinario y le descubrieron el cáncer. La operaron y salió de esa, pero nos dijeron lo peor, que tenía uno en la pared abdominal y le fue haciendo metástasis. Tuvo algunas crisis y algunos veterinarios le pusimos quimio, pero (el cáncer) se le expandió a los pulmones”, dijo Oconitrillo.

Finalmente, la familia tomó la decisión de darle la mejor calidad de vida posible y así vivió ocho meses más. Al morir la acompañaban sus peluditas hijas Luna, Roxy y Chicky.

Un mal frecuente

La Teja quiso saber más sobre cómo esta enfermedad tan común en el humano afecta a los perros, su nivel de incidencia y mortalidad, pero las investigaciones son escasas.

En Estados Unidos, los estudios indican que al menos el 50% de las muertes de los perros se dan por cáncer y explican que, como los humanos están más interesados por ellos, han logrado alargar su vida y el padecimiento es más característico de los viejitos.

Mauricio Jiménez, veterinario del Hospital de Especies Menores de la Universidad Nacional, dijo que al menos un 15% de los pacientes perros que reciben en ese centro son por cáncer y reconoció que ahora se detectan más casos.

“Al igual que en los humanos, el cáncer de mamas es el más frecuente entre las hembras. Después siguen los tumores de baso, de hueso y los melanomas y otros. Incluso, los machos también sufren de cáncer en la próstata”, expresó.

Prevención

Algunas de las razas más propensas a este mal son el american stafford, pitbull, boxer o retrivers pero cualquier perrito puede sufrirlo.

“El amo es fundamental en la detección. Hay que tocar al animal y si hay peloticas llevarlo al veterinario, puede que no sea, pero un diagnóstico en fases tempraneras le puede salvar la vida”; explicó el veterinario Francisco Ducreux.

También dijo que se debe estar atento a cualquier dolor en las patas, pérdida de peso o cualquier otra manifestación de dolor, dijo.

Mauricio Jiménez añadió estar atento a los vómitos, aumento en el tamaño del abdomen o huesos y si renquea sin razón alguna.