Ir más allá del deber que tenía de vigilar una urbanización le terminó costando la vida a un guarda de 22 años, quien murió a manos de dos maleantes que estaban tachando un carro.
Los hechos ocurrieron poco antes de las 4 de la madrugada de este domingo, en las cercanías del colegio en Granadilla de Curridabat.
El fallecido fue identificado por el OIJ como Edwin Castillo Muñoz, un joven nicaragüense que en apariencia se ganaba la vida trabajando como vigilante en una urbanización cerca del lugar donde sucedió el ataque.
De acuerdo con la versión preliminar de las autoridades, mientras Castillo estaba haciendo una ronda logró ver a varios hombres que estaban intentando tachar un taxi informal que estaba estacionado, por lo que decidió enfrentar a los maleantes.
Los desalmados no lo pensaron dos veces para tirársele encima al guarda, quien en medio de la riña recibió dos puñaladas en el estómago. Los delincuentes huyeron corriendo del lugar.
Aún con vida, Castillo usó las pocas fuerzas que le quedaban para caminar hasta la caseta de seguridad en la cual tenía sus cosas; sin embargo, no logró llegar y murió a pocos metros de llegar.