Sucesos

Policías ahora sí podrán quitarle de manera definitiva las armas a los agresores domésticos

El ministro de Seguridad, Michael Soto, asegura estar comprometido en la batalla contra la violencia a las mujeres

EscucharEscuchar

De ahora en adelante, cuando un policía atienda un caso de violencia doméstica y vea que el presunto agresor tiene armas registradas a su nombre, podrá quitárselas con la certeza de que un juez no se la va a devolver.

El ministro de Seguridad Pública, Michael Soto, firmó este lunes un acuerdo que varió el reglamento de la Dirección General de Armamento con el fin de salvar vidas.

“Hemos visto situaciones extrañas, casos de violencia doméstica en los que los hombres denunciados tenían armas de fuego registradas, dos o hasta tres armas, pero luego de que los oficiales de Fuerza Pública se las incautaban, se las devolvían desde los juzgados.

“También se les dieron permisos de portación de armas a hombres cuando tenían impuestas medidas cautelares por violencia doméstica, situaciones como esas son completamente irracionales. Viendo que la mayoría (de asesinatos a mujeres) se dan con armas de fuego, sin dejar de lado que también se pueden dar con otras armas, pensamos en qué podíamos hacer para ayudar para que esto se minimice”, aseguró el jerarca.

Con la modificación al reglamento, cuando los uniformados decomisen las pistolas, las autoridades también les quitarán a esos hombres los permisos de portación de armas. Luego, la Dirección General de Armamento se encargará de destruir las pistolas y revólveres incautados en dichas situaciones, estas modificaciones empezarán a regir cuando se publiquen en la Gaceta, en los próximos días.

Soto dice que la lucha contra la violencia hacia las mujeres y la discriminación no solo la están llevando afuera del ministerio, sino también a lo interno.

“Me preocupa que el acoso es un fenómeno silencioso, que ahí está, y solo sale a la luz cuando una compañera tiene la valentía de denunciarlo e ir hacia adelante con las dificultades que esto pueda tener”, detalló.

Por su parte, Eduardo Solano, viceministro de Seguridad, dijo que esta no es la primera acción que toman en la lucha por proteger a las mujeres, ya que recordó que hace unas semanas firmaron el protocolo contra el acoso callejero, el cual permite que los oficiales de la Fuerza Pública hagan partes policiales a los hombres que le falten el respeto a las mujeres en lugares públicos.

“El quitar las armas a los agresores domésticos nos va a permitir prevenir muchos casos de femicidios y sobre todo disminuir muchas de esas amenazas invisibles de las que no nos hemos dado cuenta y se han dado dentro de los hogares con armas”, expresó.

En la firma del acuerdo estuvo presente Patricia Mora, ministra de la Condición de la Mujer, quien agradeció al Ministerio de Seguridad Pública por esas acciones.

“Lo que se está consiguiendo es que la Fuerza Pública haga suya la lucha de las mujeres por sus derechos, esa Fuerza Pública que vi el viernes pasado en la manifestación de la no violencia contra las mujeres con un lazo anaranjado, eso vale oro en este país. Las instancias encargadas de guardar el orden público son las que están diciendo no a la violencia.

“Nosotras no estamos pidiendo beneficios, lo único que estamos pidiendo es que nos permitan vivir sin miedo y en condiciones de igualdad con nuestros hermanos varones y para eso tenemos como aliados a los compañeros y compañeras de la Fuerza Pública”, aseguró Mora.

Rocío Sandí

Rocío Sandí

Licenciada en Comunicación de Mercadeo de la Universidad Americana; Periodista de la Universidad Internacional de las Américas, con experiencia en Sucesos, Judiciales y Nacionales. Antes trabajó en La Nación y ADN Radio.

En beneficio de la transparencia y para evitar distorsiones del debate público por medios informáticos o aprovechando el anonimato, la sección de comentarios está reservada para nuestros suscriptores para comentar sobre el contenido de los artículos, no sobre los autores. El nombre completo y número de cédula del suscriptor aparecerá automáticamente con el comentario.