Steven Cortés, un costarricense apasionado por su fe, gastó todos sus ahorros para viajar a Roma y vivir el cónclave 2025, donde se elegirá al nuevo papa.
Steven Cortés, un costarricense apasionado por su fe, gastó todos sus ahorros para viajar a Roma y vivir el cónclave 2025, donde se elegirá al nuevo papa.